Treinta colectivos antirracistas caminaron junto a unos doscientos manifestantes por las calles de Madrid solicitando el cierre de los Centros de Internamientos de Extranjeros (CIE).

El recorrido de la manifestación arrancaba en Cibeles y finalizaba en Sol. Las proclamas criticaron el racismo institucional del Estado español, la colonización de América y la expropiación, además del cierre de los CIE.

"Estás entre un país y otro y cuesta encajar", nos dice una de las manifestantes que acude a la convocatoria. Con cánticos como "la tierra robada será recuperada" se unificaron las voces en busca de una solución para las zonas que históricamente han sido colonizas de potencias europeas. 

Otro de los manifestantes aseguraba que hay que analizar el racismo en España: "Hay que cuestionar y señalar la violencia histórica y actual del Estado y de Europa hacia nuestras comunidades". Uno de los cánticos fue una versión del Y viva España de Manolo Escobar, cambiando el estribillo por "España racista". 

 "El racismo hace parte fundamental de lo que es hoy España. No existe un Estado europeo que no esté basado en la colonización y en el racismo" nos dice, indignado, un manifestante. 

Hubo cánticos en memoria de Mame Mbaye, mantero fallecido tras una persecución policial, así como para Lucrecia Pérez, fallecida en 1992 y reconocida como primer caso de violencia racista en España.

Pocas caras de la política en la manifestación

Carlos Sánchez Mato, concejal de Ahora Madrid, fue uno de los pocos políticos que acudió a la convocatoria. En exclusiva para Público, aseguró que el racismo institucional es una realidad: "Nos interpela a todos, a quienes estamos en la institución. Tenemos que ser conscientes de que no se trata a todo el mundo por igual, especialmente a los más débiles". 

"En Aluche, lo que antes era un lugar cárcel franquista, que haya sido sustituido por un pozo negro de derechos humanos como es un CIE me parece una aberración y en el futuro nos avergonzaremos como sociedad", asegura el concejal. "Hay que hacerle ver al ministro de Interior que para diferenciarse del PP tiene que poner un candado a los CIE".