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La logística del Banco Santander, clave para traer a España y donar a la sanidad pública toneladas de material médico
El fondo especial creado por el grupo y sus empleados ya suma más de 100 millones de euros en aportaciones para paliar los efectos de la pandemia.
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"Queremos ser parte de la solución de esta emergencia sanitaria y económica sin precedentes". Estas palabras de Ana Botín, presidenta del Banco Santander, fueron el punto de partida de decenas de actuaciones del Grupo, facilitadas por un gran despliegue logístico, para contribuir a la lucha común contra la pandemia importando a España y donando toneladas de material sanitario y equipos médicos de alta tecnología a la sanidad pública. De este modo, el grupo financiero y sus empleados han destinado ya más de 100 millones de euros en todo el mundo a iniciativas solidarias para luchar contra el coronavirus, entre estas compras masivas de material sanitario diverso y contribuciones a investigaciones científicas de tratamientos. Hasta ahora han sido ya, entre otras aportaciones, más de cuatro millones de mascarillas para distintos organismos, más de tres millones de euros en materiales de protección para la Policía y la Guardia Civil, 2.000 camas especiales para los enfermos muy graves del hospital de campaña en la sede de Ifema (Madrid), quinientos respiradores no invasivos, miles de mantas, medio millón de botellas de agua para el personal sanitario y equipos para la desinfección de espacios públicos por la Unidad Militar de Emergencias (cañones nebulizadores, robots de detección NBQ y lanzas desinfectantes).
Víctor Matarranz, director general de la División de Wealth Management & Insurance del Santander y anteriormente director global de Estrategia del Grupo y de Santander Digital, es el responsable principal de coordinar estas iniciativas del banco contra el coronavirus. En su opinión, la escala global del banco, las donaciones de los empleados (el grupo tiene 200.000) y la colaboración de las instituciones públicas y de otras empresas privadas, han sido fundamentales para poder llevar a cabo con éxito todas las operaciones, desde el punto de vista logístico y de cierre de acuerdos comerciales con los proveedores del material traído a España.
El punto de partida fue comprar allá donde se pudiera encontrar lo requerido por muchas instituciones públicas españolas. La red internacional de contactos del Grupo ha sido clave, dado que Santander es una de las grandes empresas españolas con amplia experiencia en comprar todos los años miles de millones de euros a centenares de proveedores. Esta vez, a las relaciones tradicionales se ha unido también la plataforma digital de comercio internacional Ebury, adquirida recientemente por el Santander, donde miles de empresas de todo el mundo cierran operaciones comerciales en tiempo récord y facilitan la máxima eficiencia de la logística asociada.
Víctor Matarranz, responsable global de coordinación de las iniciativas contra el Covid-19: "Cuando aparece alguien de un hospital dando las gracias, cuando has ayudado a un enfermo... Ahí ves que todo ha valido la pena"
"Para nosotros ha sido una cadena donde nos íbamos encontrando obstáculos, que íbamos resolviendo a medida que hablábamos con unos y con otros. La capacidad de hacer piña con el resto de las empresas del Ibex ha hecho que todos hayamos conseguido movilizar un montón de material", explica Matarranz. China ha sido el país de procedencia de una buena parte de las importaciones, un país especialmente complejo en estos momentos para conseguir comprar no sólo el material, sino los permisos de salida y los vuelos de transporte internacional. "Tuvimos la oportunidad de traer miles de mascarillas junto con Inditex, en uno de sus aviones. En algún caso nos ayudó Iberia, e incluso el Ejército", cuenta Matarranz.
Al comienzo de las operaciones, "una noche hubo un cambio en las leyes de exportación chinas y las mascarillas que podían ir con un certificado, después necesitaban otro tipo de certificado", explica. "Nos las bajaron del avión y quedaron paradas en el aeropuerto unos días. Nos ayudó nuestra oficina Santander en China, para ver qué nuevos papeles hacían falta. También hablamos con otras empresas que compartían con nosotros los mismos problemas, tratando de cómo nos ayudábamos mutuamente. En una ocasión incluso nos ayudó la Embajada española, pidiendo ayuda directamente al Gobierno de China”. En España, todas las importaciones también necesitan distintos permisos, y Matarranz destaca que aquí “las administraciones han sido súper colaboradoras", especialmente para coordinar los lugares finales de distribución, en varias comunidades autónomas.
"La gran satisfacción es cuando aparece alguien de un hospital dando las gracias, cuando has ayudado a un enfermo… eso no se puede describir. Ahí todo ha valido la pena", concluye Matarranz.
Otro directivo del banco involucrado en la logística contra el coronavirus ha sido Santiago Álvarez, gerente de Banca Institucional, quien recuerda cómo en marzo estuvo teletrabajando muchos días seguidos, con sus madrugadas enteras, para coordinar la compra de miles de mascarillas y material sanitario con destino a la Junta de Castilla y León. Los proveedores chinos con que en esta ocasión había contactado el banco ponían como condición que, una vez acordado el precio, el Santander efectuara la transferencia de dinero de manera inmediata. De guardia, pendiente de la culminación del proyecto, también estaba Purificación Mendo, directora adjunta de la Oficina de Empresas de Valladolid. Esta operación culminó finalmente el 25 de marzo, cuando llegó al aeropuerto de Zaragoza el transporte del Santander para la sanidad castellano-leonesa, uno de los primeros pedidos sanitarios que España consiguió hacer aterrizar al comienzo del estado de alarma.
Adicionalmente a su despliegue logístico solidario, el Banco Santander ha recaudado dos millones de euros de clientes y terceros a través de otras iniciativas. Por ejemplo, "La Liga Santander Fest", un concierto musical festival virtual gracias al cual se han comprado otros 115 grandes respiradores para distintas UCIs hospitalariss y otras 400.000 mascarillas.
De los proyectos de apoyo a la investigación, se puede mencionar el Kids Corona, al cual el Santander ha donado 200.000 euros a un proyecto de investigación del Hospital Infantil San Joan de Déu, de Barcelona. El objetivo es generar y almacenar datos científicos sobre el Covid-19 para proporcionar a la comunidad científica evidencias sobre cómo afecta el virus a niños y embarazadas, y por qué los pequeños parecen estar más protegidos.