Javier MaríasCríticas a Javier Marías por un artículo en el que critica la "barra libre" de las víctimas de abusos sexuales

Publicado el 11 de febrero del 2018

Un domingo más, Javier Marías vuelve a estar en el centro de la polémica. El escritor ha sido muy criticado en Twitter por su última columna en El País. El texto, titulado 'Ojo con la barra libre', advierte de que si se les da crédito a todas las mujeres que denuncian abusos sexuales, "se está entregando un arma mortífera a las envidiosas, a las despechadas, a las malvadas, a las misándricas y a las que simplemente se la guardan a alguien".

Javier Marías justifica el "couch casting" (en español, "casting de sofá"), una práctica "habitual" en la industria del cine. Se refiere a "las pruebas a las que los productores de Hollywood y Broadway sometían a menudo a las aspirantes a actrices (o a los aspirantes, según los gustos)". Pese a señalar que la costumbre le parece "repugnante", se jacta de que en este tipo de prácticas "no había violencia", ya que se producía una "forma de transacción, a la que las muchachas podían negarse; y una forma de prostitución menor y pasajera, si aceptaban".

Criminaliza a las mujeres jóvenes que se casan con hombres "viejos, ricos y feos".

El escritor, cómo no, comenta el movimiento #MeToo para asegurar que el debate generado ha establecido "dos pseudoverdades: a) que las mujeres son siempre víctimas; b) que las mujeres nunca mienten. En función de la segunda cualquier varón acusado es considerado automáticamente culpable". Y lamenta que se acuse a Spacey o Woody Allen o Testino sin ser juzgados. "Las redes sociales (manipuladas) se han erigido en jurados populares, son la misma muchedumbre que exigió la ejecución de Jesús y la liberación de Barrabás en su día".

El columnista manda un recado a las víctimas de abusos sexuales, que al estar a solas con el agresor, carecen de pruebas: "Eso les ha sucedido a todas las víctimas, a las de todos los crímenes, y por eso muchos han quedado impunes. Mala suerte".

Los tuiteros han criticado duramente el artículo de Javier Marías, a quien tachan de "machista", "revulsivo" o "misógino".

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