FeminismoLa foto que (una vez más) refleja el techo de cristal de las mujeres

Publicado el 29 de enero del 2019

A veces es cierto que una imagen vale más que mil palabras. Más que hablar sobre el techo de cristal, que recordar los porcentajes de mujeres en consejos de administración o en puestos directivos en grandes empresas o medios de comunicación. O que mirar cuántas líderes de partidos políticos, cuántas alcaldesas y cuántas presidentas de comunidad autónoma hay (no hablemos ya de presidentas del Gobierno).

Lo más gráfico de todo es ver una foto de un acto o una presentación de un evento importante, donde los que mandan se ponen ante la cámara. Y muchas veces nos encontramos con que no hay ni una mujer, o hay una o dos. Una vez más, la imagen ha vuelto a repetirse y, aunque parece que estamos acostumbrados, conviene recordarlo de vez en cuando.

En este caso corresponde a la presentación, este lunes, de Ekian, el mayor parque solar fotovoltáico de Euskadi. El acto, celebrado en el Palacio Europa de Vitoria-Gasteiz, dejó una fotografía recogida por los medios con todos los participantes del proyecto. En la imagen, sólo una mujer entre 22 hombres: la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantxa Tapia. La imagen la compartió la tuitera y directora de identidad digital de la Universidad de Deusto, Lorena Fernández. Varios usuarios de la red social han coincidido en señalar lo simbólico de la imagen:

Tristemente es una imagen habitual: lo vemos cada año en la inauguración del año judicial, lo hemos contemplado en actos de empresarios o en reuniones de directores de medios de comunicación. E incluso lo vimos en una foto de la Federación de Baloncesto en la presentación del Mundial… ¡femenino!. Estas son algunas de ellas:

El rey inaugura el año judicial 2017/2018. Trece hombres, ninguna mujer.

Presentación de la Copa del Mundo Femenino 2018.

El rey emérito en la entrega de la medalla de honor de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Dieciséis hombres, una mujer (la reina).

Más ejemplos en este artículo: El techo de cristal para las mujeres se queda a un palmo del suelo