El presidente del PP de Zaragoza intenta criticar a Pedro Sánchez regalándole unas botas y le sale mal

Por

La secuencia ruboriza. Por momentos parece un sketch. Por partes; el presidente del PP de Zaragoza, Ramón Celma Escuín, abanderado pepero en materia agrícola, pensó que sería buena cosa regalarle al Presidente del Gobierno unas botas camperas porque, como se encargó él mismo de aclararle, "está muy bien venir al campo, pero hay que mancharse las botas de barro".

Hasta aquí todo correcto. Un Presidente del Gobierno comprobando el estado del campo tras el desbordamiento del río Ebro y un prometedor joven liberal –expresidente de Nuevas Generaciones en Aragón para más señas– con la aviesa intención de poner en un brete a Sánchez.

Relacionada:

Pedro Sánchez visita algunas zonas afectadas por el temporal

Una operación de riesgo la del aspirante que le permitiría, además, chapotear unos segundos en el populismo para su posterior viralización en redes. Todo tenía sentido. Vean:

Pero algo salió mal. Un pequeño detalle se le escapó a nuestro todavía tierno político conservador; su calzado. Celma le endilgó unas botas al Presidente mientras él lucía unos suntuosos mocasines. La reacción de Sánchez, por otra parte, no hace sino ahondar en el ridículo de Celma, ya que lejos de recibir a disgusto el obsequio del joven, le da las gracias con modales isabelinos. Y claro, la mofa en redes ha sido de cierta epicidad. Lean algunas reacciones:

Más de Tremending