TwitterLa historia de amor (con moraleja) que emociona a los tuiteros

Twitter es una red social donde de vez en cuando uno se encuentra con historias tan emotivas como la que hace unos días publicó la tuitera @NataliaVartan. Un interesante hilo en el que Natalia recuerda una anécdota que le ocurrió durante un viaje que hizo a Escandinavia y que en realidad es una bella historia de amor, pero de esa clase de amor que ya casi no se ve. Tomando prestado el título del famoso soneto de Francisco de Quevedo, podemos decir que esta es una historia de amor constante más allá de la muerte.
El hilo acumula 2.725 retuits y ha gustado a casi 11.000 tuiteros. Sin ánimo de hacer un spoiler les avanzamos un poco de la historia: Natalia y su pareja decidieron viajar con un grupo organizado, formado básicamente por otras parejas y familias. En el grupo, sin embargo, estaba un señor mayor con cierto aire a Paco Martínez Soria que viajaba solo e iba a su aire. Llamaba la atención. Un día Natalia y su pareja le invitaron a comer con ellos y les contó su historia y por qué había viajado a Escandinavia y a los fiordos pese a que no tenía mucho dinero para hacerlo y el viaje le suponía un gran esfuerzo económico. El señor mayor no había ido de turismo, sino por otra razón. Y hasta aquí podemos leer.
Además, el hilo de Natalia contiene una moraleja sobre las personas mayores y sobre cómo aprovechar el tiempo que nos quede, ya sea mucho o poco. Dentro hilo.
"En esto, amigos, consiste el amor": la entrañable historia de un viudo para encontrar la bufanda que le tejió su mujer
Hace unos años, mi pareja y yo hicimos un viaje a Escandinavia. Era un viaje de esos en grupo, con guía y tal, y en el grupo iba un señor que vestía como el de la imagen, pero sin cesto, ni cuadro, ni esa expresión cómica de estupefacción en la cara. (Seguimos ⬇️) pic.twitter.com/qBcXqhM0pj
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Más bien, todo lo contrario. Era un hombre anciano, de permanente sonrisa melancólica y ese brillo en la mirada típico de las personas muy inteligentes. Desentonaba por completo en el cuadro, como una judía pinta en un paquete de judías blancas. Iba solo, sin compañía de nadie.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Y desde el primer momento, llamó mi atención. Los demás íbamos con nuestras parejas, algunos con su familia con hijos al completo, y el señor, todo prudente, no molestaba a nadie. Iba a lo suyo, hasta que un día, cuando paramos a comer en una de las rutas que hicimos,…
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
…, le invitamos a que se sentara con nosotros para que no tomara el almuerzo solo, como solía hacer. Y nos pusimos a conversar, claro. Nos contó que tenía dos hijas y que su mujer hacía poco que falleció. Decía que siempre fueron una familia humilde. Nunca pasaron penurias,…
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
…, pero jamás pudieron permitirse ningún lujo, como hacer un viaje, a pesar de haber trabajado como un mulo siempre. Nos contaba, orgulloso, que sus hijas ahora vivían mucho mejor que él de más joven, y que le apenaba mucho que su esposa no pudiera vivir para verlo.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Entonces, con esa mirada propia de quien admira a otra persona, sacó su cartera y nos enseñó una foto de ella que guardaba en ese compartimento de plástico transparente que llevan las carteras. Era una foto de cuando era joven. La típica foto en blanco y negro de estudio.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
De media sonrisa, mirada perdida, peinado a la moda de la época y la mejor camisa del armario.
—Era guapa, ¿verdad?— Nos preguntaba con cara de adoración.
Yo tuve que luchar con todas mis fuerzas para retener las lágrimas porque estas cosas me emocionan una barbaridad.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Y más aún con lo que nos contó a continuación. Nos dijo que, por la razón que fuera, a ella siempre le hizo ilusión conocer Escandinavia. Los fiordos, en concreto. Y que fantaseaban con ir algún día, cosa que no se produjo.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
—Ella ya no puede venir en persona, pero no me quiero morir también yo sin traerla, aunque solo sea su foto.
Aquí ya no pude retener las lágrimas, claro, pero el hombre siguió hablando. Desahogándose, más bien. Nos decía que sus hijas le tildaban de loco.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Le decían que cómo iba a hacer un viaje así, solo… ¿Y si le pasaba algo?
—Más pronto que tarde me pasará algo, soy un viejo—se justificaba— ¿Qué más da dónde? No me quiero morir sin hacer este viaje.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Esto viene a cuento porque hoy he escuchado a alguien criticar a una persona mayor por hacer algo que consideraba propio de gente más joven. Da igual quién y qué, eso no importa. Y me he acordado de este señor y de cómo la vida nos arrastra en nuestro día a día hasta el punto…
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
…de dejar para más adelante cosas que nos hacen ilusión, sin pensar en que nadie nos asegura que podamos hacerlas en el futuro. Como le pasó a esposa de este hombre. Las obligaciones siempre se imponen. Pero llega una edad en que las personas se retiran.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Se jubilan, del trabajo y de la vida, y las obligaciones las asumen otros. Los hijos, los más jóvenes, las personas que éramos niños cuando éstos ancianos trabajaban, y ahora somos adultos. Ellos, con su trabajo, mantuvieron el sistema que nos formó, y ahora nos toca el turno…
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
…a nosotros de mantenerlo y a ellos de tener tiempo para hacer lo que no pudieron hacer en el pasado. A las personas mayores hay que dejarlas hacer lo que les dé la gana (mientras no hagan daño a nadie). A saber cuántos sueños quedaron en el camino de sus vidas.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Cuántos proyectos truncados, como el de este señor y su esposa. Ellos se sacrificaron para que nosotros podamos estar aquí ahora y es justo que aprovechen el tiempo que les queda, sobre todo si les surge la oportunidad de llevar a cabo alguno de esos sueños o proyectos.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Aunque sean "propios de gente más joven". Yo tengo un respeto inmenso, casi reverencial, por las personas mayores. Y mientras más mayor me hago yo, más crece ese respeto porque más les entiendo. Me emociona escuchar sus historias, imaginarlos de jóvenes, enamorados, ilusionados.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
Un día, yo seré uno de ellos y me gustaría tener tiempo entonces de hacer lo que ahora no puedo. Me gustaría llegar a esa edad y que nadie me juzgara por hacer lo que no pude de más joven por no tener tiempo, dinero u oportunidad.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022
—Intentad ser felices—Nos dijo el señor cuando se despidió de nosotros el último día—Es lo único que queda cuando llegas a una edad.
Y, bueno, lo intento. Procuro tenerlo en cuenta y lo intento.
— Natalia Vartán (@NataliaVartan) April 3, 2022