El hilo de Eduardo Garzón que explica el efecto de la excepción ibérica en el recibo de la luz: "Es un parche insuficiente, pero ha logrado reducir un 18%"

Publicado el 30 de agosto del 2022

El precio de la luz, del gas, los gasoductos, la guerra en Ucrania, el ahorro energético, el aire acondicionado a 27ºC… en poco tiempo la cantidad de conceptos nuevos para tratar de entender qué demonios pasa en Europa se han vuelto inabarcables, y es normal que la gente se haga un lío.

Entre ellos, está la famosa excepción ibérica, que se suponía que bajaría el precio de la luz, pero éste no hace más que incrementar. Y, realmente, está cumpliendo su función aunque de manera insuficiente, como bien explica el economista Eduardo Garzón.

Garzón explica en un hilo de Twitter las idiosincrasias de esta medida. Empezando por el principio, esta medida pretende poner un tope al precio del gas a la hora determinar el precio mayorista de la luz. Con este tope, el precio debería bajar.

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"Es una medida mal orientada, claramente insuficiente y encima no se ha explicado nada bien", según Garzón. Esto ocurre porque al poner el tope al gas, las empresas pierden dinero. Un dinero que no repone el Estado, sino los consumidores.

Aunque no todos. Garzón identifica a los dos tipos: "los que tienen contrato en el llamado mercado regulado o PVPC, más todos los consumidores que hayan firmado un contrato en el llamado mercado libre a partir del 26 de abril" y el resto. A los primeros se les aplica una tarifa para compensar al gas.

Esta tarifa aumenta según sube el precio internacional del gas, por lo que aunque la excepción ibérica esté en funcionamiento ven cómo sus facturas siguen creciendo.

La cuestión es que esto no significa que la excepción ibérica no funcione, sino que sin ella el incremento de sus facturas sería aún mayor. En concreto, una media del 18% más.

Por eso, otros países como Alemania, Francia o Italia tienen unos precios aún más elevados con los de España. Lo que ha llevado a la decisión de la Comisión Europea de intervenir el mercado eléctrico.

Una medida que Garzón celebra aunque considera que llega tarde. "¡A buenas horas mangas verdes!", comentaba sobre la noticia.

Con este hilo el economista pretende resolver dudas y tranquilizar a aquellos que han visto cómo ha crecido la factura de la luz a pesar de la medida puesta en marcha. Algunos creían que en lugar de beneficiarles, se trataba de un impuesto más que subía su precio.

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