CoronavirusTremendo cabreo en las redes con la clase política y empresarial tras la gala de Pedro J. Ramírez en pleno estado de alarma

Publicado el 27 de octubre del 2020

Ministros del Gobierno, entre ellos el de Sanidad; presidentes de comunidades, políticos del PP, del PSOE y de Ciudadanos, consejeros y presidentes de las mayores empresas españolas, directores generales, banqueros, militares, deportistas… Decenas de los personajes más relevantes de la política y los negocios de este país acudieron a la gala de Los leones de El Español, organizada por el periódico digital de Pedro J. Ramírez, en pleno estado de alarma por la pandemia del coronavirus.

Entre los nombres de los presentes, Salvador Illa, Juan Carlos Campo, Margarita Robles, Emiliano García Page, Pablo Casado, Isabel Díaz Ayuso, José Luis Sánchez Almeida, Teodoro García Egea, Inés Arrimadas, Ana Pastor, Dolores Delgado, Florentino Pérez, Begoña Villacís, Francisco Reynés, Cristina Álvarez Guil y un largo etcétera …

El evento, celebrado en el lujoso Casino de Madrid, se produjo sólo un día después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, llamara a los españoles a reducir al máximo todos los contactos sociales y que recomendara quedarnos en casa "todo lo que sea posible". El mismo día, catorce comunidades se encontraban en riesgo alto o extremo. Ahora siguen aumentando los cierres perimetrales y toques de queda en todo el país ante los preocupantes datos de contagios y muertes que aumentan cada día.

En este contexto, la imagen de toda esa gente perteneciente a la clase dirigente del país, reunida en un suntuoso salón con la que está cayendo, quedará grabada en la retina de muchos.

Una imagen que no ayudará a transmitir a los españoles la gravedad de la pandemia.

Muchas críticas se han centrado especialmente en el ministro de Sanidad, Salvador Illa, por acudir al evento:

En su cuenta de Twitter, Pedro J. Ramírez ha hablado de "mentiras interesadas" y de "fanatismo" y "envidia", asegurando que fueron 80 personas las que asistieron, con una "ocupación del 33%".

Este es un pequeño reflejo del vendaval de críticas que este martes arreciaba en las redes: