Cuentan que solo en la ciudad de Barcelona se pueden hallar más de 1300 refugios creados durante la Guerra Civil con una capacidad para proteger a 300.000 personas. Y es que cualquier conflicto militar exige a sus contendientes la construcción de estructuras, generalmente bajo tierra, tanto para proteger a la población civil como ofrecer puestos de mando secretos a los militares. A continuación, recorremos la geografía española visitando algunos de esos refugios de la Guerra Civil que se pueden visitar.
Refugios de la Guerra Civil en Almería

La longitud de los refugios almerienses supera los cuatro kilómetros y medio, aunque no todos los túneles están interconectados. El diseñador de esta infraestructura subterránea fue el arquitecto Guillermo Langle, autor, entre otros edificios, de la Ciudad Jardín o de la Estación de Autobuses.
Construidos en 1937, los refugios de Almería tienen una profundidad media de nueve metros con unos dos metros de ancho, bancos corridos en los laterales estando todas las galerías y salas cubiertas con bóveda de cañón que reforzaban la seguridad de aquella estructura que soportó el devastador Bombardeo de Almería.
Actualmente, se puede conocer el túnel más largo, el situado bajo el Paseo de Almería, uno de los mejores conservados de toda Europa, a través de visitas guiadas que nos conducen también al quirófano utilizado durante el final de la contienda.
Refugios antiaéreos de Valencia

En Valencia se erigieron una cincuentena de refugios desde 1936 con dos soluciones constructivas diferentes. Por un lado, los abovedados que hemos visto en Almería y, por otro, los adintelados. Esta red de refugios, algunos de los cuales contaban con baños y cocina, se completó con la adecuación de 200 sótanos.
Entre los diversos refugios que el Ayuntamiento de Valencia ha restaurado y acomodado para su visita destaca el refugio antiaéreo Bombas Gens descubierto recientemente tras la rehabilitación de la fábrica de bombas hidráulicas Bombas Gens en 2017: un refugio de hormigón en el que caben 40 personas, sin bancos corrido ni retretes, aunque sí con algunos mensajes escritos en la pared recordando normas básicas de convivencia.
Tampoco podemos perdernos el refugio Grupo Escolar del Ayuntamiento en Arzobispo Mayoral con una capacidad para 700 personas, cincos naves cubiertas con bóvedas rebajadas de hormigón, en su mayoría con bancos, retretes y electricidad.
Refugios de la Guerra Civil en Alicante

No dejamos aún la Comunidad Valenciana y bajamos a Alicante para conocer sus seis refugios antiaéreos que desde noviembre pasado han sumado cuatro a los ya conocidos de Séneca y Balmis en una iniciativa conocida como “Refúgiate en la memoria de Alicante” dando un valor pedagógico e historia a esta clase de construcciones defensivas.
Estos refugios formaron parte de una red de infraestructuras subterráneas que llegó a sumar casi 90 construcciones. Último reducto de la República, Alicante fue el objetivo de diversos bombardeos que destruyeron más de 700 edificios, buena parte de cuyos habitantes pudieron sobrevivir gracias a la construcción de este estos refugios bajo el suelo de la ciudad alicantina.
Refugio de la Guerra Civil en Albacete

Construido en la histórica plaza del Altozano, este refugio de 1937 utiliza una fábrica de ladrillo y mortero de cemento con relleno de hormigón. Fue una de las consecuencias del bombardeo de la ciudad manchega el 19 de febrero de 1937 por parte de la Legión Cóndor en el contexto de la batalla del Jarama.
Pese a que ya se encontraba en obras, este terrible bombardeo aceleró la construcción, junto a otros refugios que se convirtieron en indispensables para defender a la población civil en los meses venideros. Con sus casi dos metros de ancho y sus bancos anclados, este refugio también contaba con indicaciones para promover la buena convivencia en situaciones extraordinariamente delicadas. Abierto desde el año 2000, ha sufrido diversas remodelaciones hasta su última reapertura en agosto del año pasado.
Museo-Refugio de la Guerra Civil en Cartagena

Unas obras en la Plaza de San Francisco permitieron en 2013 descubrir una trinchera de 50 metros de largo por 2 de ancho que sirvió de refugio durante los bombardeos de la Guerra Civil en la ladera del monte de la Concepción.
El hecho de que Cartagena fuera base naval de los republicanos exigió la construcción de diversas estructuras subterráneas para proteger a los civiles de los ataques de los sublevados. Abierto desde 2004, es uno de los mejores centros de interpretación de la Guerra Civil que hay en España.
Refugio-Museo de Cervantes en Alcoy

Regresamos a la Comunidad Valenciana para conocer más de cerca el refugio rehabilitado y abierto al público desde 2006 en Alcoy. Recordemos que esta ciudad fue bombardeado hasta en siete ocasiones por la Aviación Legionaria italiana entre septiembre de 1938 y enero de 1939.
Uno de los más de 25 refugios antiaéreos que los republicanos construyeron en la ciudad alicantina fue este con capacidad para 1000 personas y uno 100 metros de longitud, estando estructurado en 8 galerías conectadas con dos pasillos laterales, contando también con lavabos, retretes y una habitación para primeros auxilios.
Refugio 307 de Barcelona

A pesar de que, tal y como hemos indicado al inicio de este texto, más de 1300 refugios fueron creados en la Ciudad Condal, el 307 es uno de los pocos habilitados para la visita. Se trata de uno de los mayores refugios construidos, contando con la particularidad de aprovechar la orografía de la ladera de Montjuic, en el barrio del Poble-Sec.
El refugio 307 está organizado con una laberíntica estructura interna con casi 400 metros de túneles que incluían electricidad, cocina, lavabo, asientos y hasta una zona de recreos para niños, además de una enfermería. Actualmente gestionado por el Museo de Historia de Barcelona, ofrece visitas guiadas.
Los refugios de Madrid

En la capital española no podían faltar los refugios teniendo en cuenta que fue una de las ciudades más castigadas por la Guerra Civil. Durante los bombardeos aéreos de noviembre de 1936, las estaciones de metros de las tres líneas de entonces fueron refugios improvisados. Hoy, la antigua Estación de Chamberí ofrece visitas en las que recordar aquellos dramáticos momentos.
Además, el delicioso Parque del Capricho también cobija un búnker que llegó a ser Cuartel General del Ejercito Repúblicano de Centro. Así mismo, en las últimas obras en la zona del Retiro se descubrió un refugio de 1936 finalizado en diciembre de 1938, según las fuentes. Se trata de un refugio para población civil sin estructura defensiva con un aforo para casi 300 personas con pasillos muy estrechos que no suman más de 1,15 metros. Se prevé que a lo largo de este 2022 este refugio sea también visitable.