Las tierras gaditanas albergan la belleza de Andalucía en muchos de sus rincones, desde la costa hasta los fabulosos parques naturales de su interior. Como resultado, encontrarás pequeñas poblaciones, acogedoras y pintorescas, que merecen la visita, ya sea para una excursión, una breve escapada o unas completas vacaciones.
Estos son algunos de los pueblos más bonitos de Cádiz. Te recomendamos que no dejes de conocerlos si tienes ocasión y, si vives cerca de ellos y todavía no te has acercado a descubrirlos, todavía estás a tiempo.
Algodonales

Uno de los pueblos más bonitos de Cádiz es Algodonales, en plena Sierra de Líjar. Cuenta con un patrimonio de elevado interés cultural, de hecho, fue catalogado como Conjunto Histórico-Artístico en 1985, además de estar considerado Bien de Interés Cultural y formar parte de la Ruta de los Pueblos Blancos.
Entre sus calles y naranjos destacan su docena de fuentes, sus lavaderos decimonónicos y la iglesia barroca de Santa Ana. En las proximidades se encuentra la Ermita de la Virgencita y el yacimiento arqueológico del Cerro de la Botinera.
Castellar de la Frontera

También catalogado como Conjunto Histórico-Artístico, en este caso desde el año 2006, Castellar de la Frontera es uno de esos pueblos pintorescos, con castillo medieval incluido, en un entorno privilegiado, cerca del embalse del Guadarranque.
Entre sus edificios religiosos destacan el convento de San Miguel de La Almoraima y la iglesia del Divino Salvador, y entre su arquitectura civil, no te pierdas el Palacio de los Condes de Castellar, en el que se ubica en la actualidad la casa consistorial y el Molino del Conde, del siglo XIII.
Zahara de la Sierra

Dentro del Parque Natural Sierra de Grazalema, se esconde otro de los pueblos gaditanos más bonitos. Nos referimos a Zahara de La Sierra, que en 1983 fue declarado Conjunto Histórico-Artístico. También está junto a un embalse, en este caso, el embalse de Zahara-El Gastor, en el que se realizan diversas actividades de ocio.
El Centro de Interpretación de la Villa Medieval se encuentra en la antigua Iglesia Mayor, y entre los puntos de interés que no puedes perderte se hallan la Puerta de la Villa, el Poblado Nazarí, la Torre del Homenaje del Astillo, la iglesia barroca de Santa María de la Mesa y la capilla de San Juan de Letran.
Arcos de la Frontera

El primero de los pueblos por los que discurre la Ruta de los Pueblos Blancos de Cádiz es Arcos de la Frontera. Puedes contemplar una hermosa vista de la localidad desde el mirador de la Peña de Berlanga, antes de acercarte a conocerlo. Pasea por la Plaza del Cabildo y el callejón de las Monjas, y acércate hasta el Parador.
Bornos

A las orillas del embalse de Bornos, se sitúa la localidad homónima, un pueblo declarado Conjunto Histórico-Artístico en el que se alza inconfundible su torre fortificada, de origen árabe y posterior estilo renacentista.
Destaca su patrimonio arquitectónico religioso con el convento del Corpus Christi y los monasterios de los Franciscanos, de los Jerónimos y de Santa María del Rosario, de entre los siglos XVI y XVII, pero también te encantarán sus casas señoriales y el yacimiento arqueológico Carissa Aurelia.
Setenil de las Bodegas

Setenil de las Bodegas no es solo uno de los más bellos de la provincia, sino también de los más conocidos de Andalucía. Y es que sus construcciones típicas, enclavadas en las rocas resultan inconfundibles. Sus callejuelas, sus casas tradicionales, su hermoso ayuntamiento, sus iglesias y ermitas fueron declarados Conjunto Histórico-Artístico en el 1985.
Torre Alháquime

Catalogado como Conjunto Histórico-Artístico, Torre Alháquime se encuentra en la comarca de la Sierra de Cádiz y sus laberínticas calles y sus edificios lo convierten en otro de los pueblos más bonitos. El castillo, la antigua fortaleza nazarí, la casa del bandolero El Tempranillo, la iglesia de Nuestra Señora de la Antigua y el monumento al Sagrado Corazón son algunas de las paradas ineludibles.
Olvera

Otro Conjunto Histórico-Artístico, Olvera, constituye un pueblo de postal. Su castillo en lo alto, de finales del siglo XII, y sus casas blancas invitan a sumergirse en él para conocerlo. El Santuario de Nuestra Señora de Los Remedios, el convento de Caños Santos, la iglesia de La Victoria y la Parroquia de Nuestra Señora de la Encarnación son las otras visitas obligadas.