"Me he hecho fuerte conmigo misma, luchando por lo que siempre he soñado, ser feliz"

Ana Hellen siempre se sintió mujer y a los 26 años supo que lo que sentía obedecía a una realidad compleja: era, es una persona intersexual, alguien que nace con cromosomas, órganos reproductivos y genitales de hombre y de mujer. Cuando nació solo vieron órganos externos de varón, le asignaron género y le inscribieron en el registro civil com Sergio. Su vida fue un infierno en el colegio, abandonó los estudios y superó una depresión. Ningún médico buscó respuesta a que tuviera la regla si se la consideraba un chico. A los 21 decidió lo que quería con apoyo de los suyos y se descubrió la persona que ha logrado ser feliz.