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Detenido un polizón oculto en el hueco del ancla que trataba de introducir 100 kilos de cocaína
Agencia Atlas
Desde la bodega del carguero, los agentes ayudados por la tripulación acceden al escobén. Un largo tubo de diámetro muy reducido donde se deposita la cadena del ancla. Aquí ha estado escondido el polizón con los fardos de droga. Un viaje interminable desde Colombia hasta su detención en Algeciras. Las autoridades griegas habían alertado del posible alijo: cuatro fardos de cocaína; 109 kilos de droga que viajaban ocultos en la proa del barco. Los casi 300 metros de eslora del carguero dificultaban su localización; viajaba en la parte más alejada de la tripulación. En el minúsculo habitáculo entre la droga, una bolsa con algo de comida, varios teléfonos móviles y localizadores GPS. Ocultarse en el hueco de la cadena supone un enorme riesgo. Con mala mar los pesados eslabones llegan a desplazarse. El polizón podría haber muerto aplastado durante la travesía o en las maniobras de atraque del barco.
-Redacción-