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Nuevo encontronazo en el seno de la coalición. Esta vez con Bildu de por medio y a cuenta de la derogación de la reforma laboral. Una derogación que fue firmada como íntegra con Bildu y Podemos pero que el PSOE rebajó tres horas después de hacerlo público. El vicepresidente Pablo Iglesias ha asegurado en RNE que "lo firmado y los escrito en un papel es lo que se ha acordado. Creo que estoy  siendo cristalino". Frente a él el ministro de Transportes ha respondido en una entrevista en Onda Cero que el PSOE "siempre hemos llamado a esos puntos los aspectos lesivos" de la reforma laboral. Y ese es el acuerdo". Al embrollo se suma que la portavoz en el Congreso plasma su firma en un acuerdo del que  Ábalos asegura desconocer porqué se escribió sin lo aclarado después: "No lo podría responder exactamente porqué se hizo en esos términos -afirma- y no en estos otros tan precisos". Malestar también en otros miembros del Gobierno. Según ha podido saber Informativos Telecinco la vicepresidenta Calviño considera que la situación del país no está para entrar en la reforma laboral. Ajenos a la polémica, Bildu asegura que el acuerdo no es papel mojado. El coordinador general de EH Bildu ha hecho valer hoy su acuerdo: "Ayer firmamos un acuerdo. Éste es el acuerdo.  Nuestra palabra se cumple". El lío se fue fraguando al tiempo que se debatía la prórroga del estado de alarma. La portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurúa esperaba en la tribuna del Congreso poder "llegar a un acuerdo con ustedes para derogar íntegramente la reforma laboral", a lo que el presidente del Gobierno respondía que ese es un "compromiso de investidura", "el de derogar la reforma laboral permanece indeleble". El acuerdo, sin embargo, se conoció después de la votación para no malograr el sí de Ciudadanos. E incluso siendo conscientes de que esas abstenciones no eran necesarias. -Redacción-