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  Pasada la Navidad ya estamos pensando en Nochevieja. Una celebración que va a estar también muy marcada por la pandemia. Por ello una bodega de Vizcaya ha puesto en marcha una novedosa iniciativa. Están recogiendo mensajes de todo el mundo para meterlos en botellas y sumergirlos el último día del año en el Cantábrico, un ritual para ahogar lo malo y esperar que de 2021, sólo emerjan buenos propósitos. Las profundidades del mar de Plentzia albergarán los mejores deseos de personas de distintas partes del mundo. La bodega submarina que envejece allí sus vinos (Crusoe Treasure) ha impulsado una iniciativa mediante la cual artistas de reconocido prestigio pintarán cuatro botellas magnum de su cosecha y en su interior, en vez de vino, se depositarán mensajes de esperanza para 2021, escritos por personas de diferentes países a través de las redes sociales. Las botellas serán sumergidas en el arrecife artificial el próximo día 31, punto de partida para enterrar lo viejo en lo profundo y comenzar el camino para emerger a una nueva esperanza, por un futuro mejor. Los mensajes en las botellas, al igual que ocurre con el vino, pasarán mucho tiempo en las profundidades del mar de Plentzia, para ser emergidas a lo largo de los próximos cuatro años, una de las botellas cada año. "La luz de ese día y los vinos Crusoe Treasure servirán para que podamos celebrar la esperanza cumplida junto a cada artista y los mensajes de esa botella", señalan desde la bodega submarina.