Los conservadores siguen empañados en hacer oídos sordos a las decenas de miles de personas que, en diferentes convocatorias, han protestado en la calle en los últimos meses contra sus duras reformas y recortes en servicios públicos. Siguiendo en el ejemplo de la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, que acusó a los sindicatos de actuar con 'desvergüenza' y contribuir a proyectar una imagen 'de desórdenes', la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha asegurado este sábado que su partido gobierna 'para la mayoría silenciosa' y para los que quieren 'levantar España', no para los que 'hacen algaradas'.

De esta manera se ha pronunciado la número dos de los conservadores en el discurso inaugural del XII Congreso del PP de Extremadura, en el que José Antonio Monago será reelegido como presidente. Ante la parroquia de militantes, Cospedal ha vuelto a tirar de la herencia recibida para justificar los tijeretazos del Gobierno. 'No nos vamos a callar ante la deslealtad del PSOE, que después de llevar a España a la quiebra parece que en lo único que tiene interés es en que España se hunda para sacar tajada política. No lo vamos a permitir', ha aseverado. 

Aunque de manera superficial, Cospedal ha admitido que 'solo la austeridad no ayuda al crecimiento', si bien ha matizado que, junto a las reformas, el control del gasto es una 'condición indispensable' para la recuperación de la economía y del empleo.

No ha escatimado tampoco en dardos a los socialistas, a los que ha referido como unos 'cínicos y demagogos' que 'están para quedarse un tiempo donde están,  en la oposición'. 'Vamos a seguir creciéndonos ante la adversidad', ha animado desde el atril, desde donde ha animado a la militancia conservadora a demostrar que la 'austeridad' y la 'sobriedad', es 'lo más importante'. 'Tenemos mucho camino por recorrer, los tiempos no son fáciles, por eso nos tienen que ver a nosotros con más aliento que nadie', ha aseverado. 

En este punto, la dirigente del PP ha sacado pecho al recordar que el Gobierno ha reducido en casi un 50% la partida presupuestaria dedicada a publicidad institucional. 'Antes las reformas no se hacían, consistían en hacer publicidad con los cartelones del Plan E', ha asegurado. Sin embargo, Cospedal no ha explicado a su auditorio que el Gobierno empleará, durante 2012, cuatro millones de euros para publicitar las bondades de una reforma laboral que ha sido muy contestada en la calle por precarizar relaciones laborales y abaratar el despido. 

Sin salirse del argumentario del PP y del Gobierno, la mano derecha de Rajoy en el partido ha defendido que los conservadores apuestan por la 'sostenibilidad' de los sistemas públicos, en relación a educación y sanidad, dos partidas que están quedando especialmente tocadas tras los recortes. 'Somos los que vamos a defender la viabilidad del sistema sanitario, pero no nos gusta ver cómo el PSOE nos deja la sanidad con 16.000 millones de euros deuda. Es muy complicado para el PSOE hacer discurso, pero es que el de la algarada ya no vale. Ya no les creemos', ha insistido. 

Sin salirse del guión marcado por el ministro José Ignacio Wert, Cospedal ha reiterado la necesidad de 'hacer reformas' porque, ha dicho, en España 'tenemos muchas universidades, pero ni una está entre las 100 mejores del mundo'. 'El mayor problema de la universidad no es el de la financiación, que también, porque nos han dejado una buena tostada, sino los resultados', ha incido la también presidenta de Castilla-La Mancha.'¿Por qué le parece mal al PSOE que queramos que los estudiantes estudien?', antes de acusar a los socialistas de querer 'jóvenes y jóvenas', ha ironizado, que estén 'menos formados y peor preparados'.