El entrenador Vinny Del Negro salió por la puerta de atrás de la organización de los Bulls de Chicago y volvió al United Center como máximo responsable de los nuevos Clippers de Los Ángeles y su estrella el alero novato Blake Griffin, que lo ayudó a vengarse de su ex equipo.

Griffin, que jugó 39 minutos, aportó 29 puntos y dirigió el ataque de los Clippers, que ganaron por 100-99 a los Bulls, a los que rompieron una racha de siete triunfos consecutivos.

El alero estrella de los Clippers logró también 12 rebotes para conseguir el decimoquinto doble-doble consecutivo.

Del Negro fue despedido de los Bulls en mayo pasado después de haber conseguido registro de 82-82 en dos temporadas, además de que tuvo un fuerte altercado con el presidente de operaciones de ese equipo, John Paxson.

Con su triunfo los Clippers (7-21) lograron dos triunfos seguidos fuera de su campo. Antes de esta racha el equipo angelino había sumado 15 derrotas consecutivas como visitante, incluyendo 11 en la presente campaña.

Además de Griffin, el base Baron Davis aportó 16 puntos y el escolta Eric Gordon consiguió otros 15 para los Clippers.

Por los Bulls, el base Derrick Rose tuvo dos tiros desde la línea de personal cuando restaban 0.8 décimas de segundo para concluir el tiempo reglamentario, pero falló el segundo tiro, que habría permitido a los Bulls empatar el partido.

Rose lideró a los Bulls con 34 puntos, mientras que el alero Carlos Boozer aportó 25 tantos y el sudanés Luol Deng llegó a los 17, sin que tampoco fuesen suficientes para evitar la derrota sorpresa.

Los Bulls (16-9) siguen como líderes destacados en la División Central con cuatro juegos de ventaja sobre los Pacers de Indiana (12-13), que son segundos.