Los accionistas del Banco de Valencia aprueban la entrada del FROB en el capital

El 98,99 por ciento de los accionistas de Banco de Valencia han aprobado la entrada del Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria (FROB) en el capital, mediante un aumento de hasta un máximo de mil millones de euros, lo que supondría alrededor del 91 % de la participación.

Antes de la votación en la Junta de Accionistas de la entidad, el FROB había pedido el apoyo a esta propuesta, que contempla la reducción del capital de 123 a 98 millones y la ampliación posterior, en la que Bancaja Inversiones ha renunciado al derecho de suscripción preferente de sus acciones.

El FROB ha anunciado que está revisando las actuaciones de los anteriores gestores del Banco de Valencia y que iniciará en fechas próximas "alguna acción legal significativa" si detecta irregularidades.

Los administradores del FROB en la entidad están elaborando "un informe muy amplio y preciso" a partir del cual entienden que en fechas "no muy alejadas" iniciarán "alguna acción legal significativa derivada de los hechos y circunstancias" que van conociendo y documentado de forma progresiva, ha dicho el administrador Juan Antonio Iturriaga ante la Junta.

En respuesta a las intervenciones de los accionistas, Iturriaga, que ha ejercido de presidente de la mesa de la Junta, ha reiterado hasta en tres ocasiones que se están revisando las actuaciones de los anteriores gestores del banco para tomar medidas al respecto si se detectan irregularidades.

No ha descartado que el Banco de Valencia "supere ampliamente" el 20 % de tasa de morosidad y ha reconocido que la situación patrimonial de la entidad es "muy delicada" con un déficit de recursos propios en cuanto a la ratio de solvencia de 997 millones.

Iturriaga, que se incorporó al Banco de Valencia tras ser cesado como administrador de otra caja valenciana, la CAM, ha reiterado que en el proceso de venta de la entidad se está cerrando la segunda fase y el día 17 se remitirá a las entidades interesadas la documentación para que conozcan el estado del banco, que presenta una dependencia mayorista "muy elevada", de casi el 50 %.

Las cuentas anuales de 2011 del banco han sido aprobadas por el 76 % de los accionistas, y la gestión ha recibido el 7 % de los apoyos, aunque el 88,8 % se ha abstenido.

El aumento del capital supondrá la emisión de hasta 5.000 millones de acciones acumulables, de 0,20 euros de valor nominal cada una. Al renunciar Bancaja a la suscripción preferente, las acciones se cambiarán una antigua por cada once nuevas.

En relación con el proceso de suscripción de las nuevas acciones, el administrador ha indicado que el FROB perdería "mil millones" si al final es el único que acude a la ampliación.

Respecto a la marca, el FROB pondrá "el máximo énfasis" en que se tenga en cuenta por parte de los potenciales compradores tanto la marca como el edificio emblemático de su sede en Valencia.

Durante la Junta, que se ha prolongado durante cinco horas, los accionistas que han intervenido han coincidido en atribuir a Bancaja la responsabilidad de la gestión del banco y han defendido la valencianidad y la marca de la entidad, así como un mayor valor de la acción.

Además, ha aprobado, con una abstención del 88,36 %, promover una acción social de responsabilidad contra los antiguos gestores José Luis Olivas, Aurelio Izquierdo, Domingo Parra y Antonio Tirado y las sociedades que representan.

En la Junta, en la que ha participado el 79,77 % del capital, el 8,59 % presente y el 71,18 % representado, Iturriaga ha afirmado que la ampliación de capital de hasta mil millones de euros es "el mejor acuerdo posible" para evitar la liquidación y garantizar la continuidad de la entidad, y permite la entrada del Fondo de Garantía de Depósitos o del FROB lo que asegura que siga en el mercado como entidad competitiva.

Las necesidades de provisiones, según los cálculos realizados a partir de los nuevos requerimientos de capital aprobados por el Gobierno, pueden alcanzar los 1.336 millones.

El banco ha comunicado hoy que necesita dotar otros 509 millones adicionales con cargo a sus resultados para cumplir con las nuevas exigencias para sanear los activos inmobiliarios.