Este artículo se publicó hace 15 años.
Al menos 100 muertos en una explosión en un bar de Rusia
Las primeras hipótesis apuntan a que la explosión pudo estar causada por el uso incorrecto de algún tipo de dispositivo pirotécnico
Isabel Piquer
Una explosión en un bar en la ciudad rusa de Perm ha matado a por lo menos 100 personas y ha causado heridas a otras 60, según agencias de noticias rusas que citan fuentes de las fuerzas de seguridad.
Las primeras hipótesis apuntan a que la explosión pudo estar causada por el uso incorrecto de algún tipo de dispositivo pirotécnico, que podrían ser petardos, en el interior del bar El caballo cojo, en el que había unas 200 personas en el momento del suceso.
“La explosión ocurrió a las 23.15 hora local” (21.15 en España), de acuerdo con el Ministerio de Emergencias, informa Reuters. Sesenta personas han sido trasladadas a los hospitales cercanos.
Situada a 1.400 kilómetros al este de Moscú, Perm tiene una población de 1,2 millones de habitantes y es la sexta ciudad más grande de Rusia. La explosión ocurre días después de que un atentado terrorista contra el tren Nevski Express, que cubría el trayecto entre Moscú y San Petesburgo, se cobrara el pasado 27 de noviembre 26 muertos y dejara cerca de un centenar de heridos.
Dos ciudadanos españoles salieron ilesos del incendio que se cobró anoche la vida de al menos 103 personas en un club nocturno de la localidad rusa de Perm, informó hoy el ministro del Interior de Rusia, Rashid Nurgalíev.
"Los sacaron rápidamente del club, no sufrieron heridas y se encuentran en su hotel", dijo Nurgalíev a la prensa en Perm, según la agencia Interfax.
El titular del Interior no identificó a los ciudadanos españoles. Por su parte, fuentes del consulado de España en Moscú dijeron a Efe que están tratando de comprobar que no hay ningún español entre las víctimas del incendio.
Explicaron no hay ciudadanos españoles empadronados en Perm, aparte de "niños de la guerra", evacuados a la Unión Soviética durante la guerra civil española, y sus descendientes, algunos de ellos con apellidos rusos.
A juzgar por las declaraciones de Nurgalíev, los dos españoles que se hallaban en el lugar del siniestro son turistas u hombres de negocios de paso en Perm.
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