Al menos 13 muertos por la represión de las fuerzas del régimen sirio en Homs

Al menos trece personas murieron hoy por la represión de las fuerzas leales al régimen de Bachar al Asad en la provincia central de Homs, uno de los bastiones de la oposición en Siria, informaron grupos opositores.

Los Comités de Coordinación Local revelaron a Efe que hubo once muertos en la localidad de Haula, mientras que se registraron otros dos en la ciudad de Homs.

Sin embargo, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, otra organización opositora, los fallecidos en Haula fueron diez, todos ellos trabajadores de una pequeña fábrica que perdieron la vida por disparos de un grupo armado de seguidores del régimen proveniente de aldeas cercanas.

La represión de las autoridades sirias se ha recrudecido en las últimas semanas en la provincia de Homs, donde el ejército se enfrenta a supuestos soldados desertores en unos choques que han ocasionado decenas de víctimas.

Estas informaciones no han podido ser verificadas de forma independiente debido a las restricciones que impone el régimen sirio a los periodistas para trabajar.

Hoy se espera que los ministros de Asuntos Exteriores de la Liga Árabe se reúnan en El Cairo para analizar la respuesta de Damasco a su iniciativa para solucionar la crisis en Siria, en medio de informaciones contradictorias sobre la aceptación del plan por parte del régimen de Bachar al Asad.

El Gobierno sirio anunció ayer que había alcanzado un acuerdo con el grupo de contacto de la Liga Árabe sobre un "documento final" acerca de la situación en el país, aunque poco más tarde algunos responsables de esta organización lo desmintieron en medios de comunicación árabes.

Una fuente de la Liga Árabe confirmó a Efe que Siria presentará hoy su respuesta oficial a la hoja de ruta presentada por su organismo, sin querer ofrecer más detalles.

Desde mediados de marzo pasado, Siria es escenario de revueltas populares contra el régimen de Al Asad, que han causado la muerte de unas 3.000 personas, entre ellas unos 187 menores, según las últimas cifras de la ONU.