Un alcalde australiano gana el premio al más sexista por invitar a mujeres feas a su pueblo

El alcalde australiano que invitó a las mujeres feas del país a mudarse a su pueblo porque allí encontrarían "incluso" a un hombre que las quisiera, ha ganado el premio al comentario más sexista del año.

John Moloney, alcalde de la localidad minera de Mount Isa, arrebató el galardón Ernie, concedido por las mujeres del Parlamento del estado de Nueva Gales del Sur, a todos sus contrincantes.

Hace unos meses Moloney declaró a un periódico australiano que las mujeres de "belleza desaventajada" podrían encontrar marido en su pueblo por la falta de féminas.

El edil explicó que las mujeres "no tan atractivas" eran "felices" en su localidad y que se las podía ver por la calle con "sonrisas de oreja a oreja".

Moloney declaró posteriormente a una radio local que las mujeres obesas podrían incluso perder peso bajo las miradas lascivas de los "machos" del pueblo.

Los ganadores del resto de las categorías no se quedan atrás, el Ernie de política se lo llevó el tesorero del estado de Australia Occidental, Troy Buswell, por olfatear la silla de una compañera de trabajo después de que ésta se levantara.

El galardón de periodismo fue para el responsable de una televisión local que declaró que las mujeres hacían las "noticias de salud y consumo, mientras que los hombres se encargan de las historias reales".