Este artículo se publicó hace 15 años.
Alejandro Valverde asegura que no tiene miedo de Italia
El ciclista español Alejandro Valverde asegura que no tiene miedo de Italia, país en el que la selección de España de ciclismo ha decidido no concentrarse de cara al Mundial de Mendrisio (Suiza) para evitarle problemas con las autoridades italianas.
En una entrevista que publica hoy el diario turinés "La Stampa", Valverde aborda la decisión de la selección española de ciclismo de concentrarse en Lugano (Suiza) y no en Italia, como estaba previsto, ante la inhabilitación de dos años impuesta por el Comité Olímpico italiano (CONI) por su supuesta implicación en la llamada "Operación Puerto".
El hecho de que el Tribunal Antidopaje del CONI haya decidido sancionarlo podría interferir además en la preparación del corredor de cara a la prueba en línea del Mundial de ciclismo que se disputa el próximo domingo, aunque, ante la pregunta de si teme a las autoridades italianas, Valverde tiene muy clara la respuesta.
"No, en absoluto, porque no tengo nada que esconder y siempre lo he dicho. Este año me han hecho unos cuarenta controles antidopaje, y unos dieciséis sólo en la Vuelta (a España), y el año pasado fueron más de cincuenta. Nunca he dado positivo y estoy muy tranquilo", asegura el corredor.
Ya sobre la prueba del Mundial: "De Italia me dará miedo el domingo sobre todo Cunego. Es mi favorito del Mundial y creo que vuestra selección correrá toda para él", añade.
El CONI basa su sanción para el ciclista en que la bolsa de sangre "número 18" incautada al doctor español Eufemiano Fuentes durante la "Operación Puerto", en la que se encontraron restos de EPO, contiene, según su Tribunal Antidopaje, la sangre de Valverde, reciente ganador de la Vuelta a España.
Esta sanción llevó a la Real Federación Española de Ciclismo (RFEC) a decidir cambiar el lugar de concentración de sus corredores, algo que fue anunciado el pasado miércoles y sobre lo que Valverde tiene también su propia opinión.
"No soy yo quien decide ciertas cosas. Sólo sé que tras el avión y tres horas de autobús ahora estoy más cansado que después de haber ganado la Vuelta", comenta.
"Me dijeron sólo que era mejor no alojarnos en Italia. Quizá temíamos que el CONI y la Policía hicieran controles nocturnos o una intervención clamorosa", añade.
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