Alemania analiza medidas para estimular la inversión en sectores específicos de su economía, la mayor de Europa, y moderar los efectos de la crisis de los mercados financieros, dijo el lunes un portavoz del Gobierno.

Los ministros de Finanzas y de Economía de Alemania prepararán un conjunto de ideas, centradas principalmente en sectores como las industrias automotriz y de la construcción, y las presentarán al Gabinete en el próximo par de semanas, dijo el portavoz del Gobierno Thomas Steg.

"Tenemos que hacer todo lo que podemos para tratar de levantar las tasas de crecimiento económico a través de varios incentivos", dijo la canciller, Angela Merkel, en una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro checo Mirek Topolanek en Praga tras el encuentro.

El Gobierno de Merkel ya ha introducido un paquete de 500.000 millones de euros para ayudar a estabilizar el sector bancario, pero Steg dijo que era incorrecto pensar que el Gobierno no piensa también en la economía real.

"La canciller ha dejado en claro que, en momentos difíciles, el trabajo del Gobierno es involucrarse, mirar adelante y (...) si es necesario, incorporar medidas de inversiones", dijo Steg en una conferencia de prensa.

Merkel, que se enfrenta elecciones federales el año próximo, ha dicho que se opone a un paquete de estímulo amplio, pero en Praga, la jefa de Estado enfatizó que no quería ver un declive de la economía.

"Eso por supuesto estaría conectado con un alza del desempleo", dijo, refiriéndose a Alemania y a la República Checa.

Cada vez son mayores los temores a una recesión global, y el grupo industrial alemán BDI dijo en un informe que anticipa que la industria sentirá los efectos de una caída de la demanda mundial el año próximo.

Steg dijo que el Gobierno analizará cuidadosamente y con calma las medidas que podrían dar un impulso a corto plazo a la economía y el empleo.

"Lo que podría ser útil son medidas enfocadas, específicas por sectores, para respaldar la inversión", declaró.

La asociación VDA del sector automotriz de Alemania ha instado a que Berlín asegure que las empresas del sector no se vean en desventaja debido a que otros países, especialmente Estados Unidos, han ofrecido respaldo a sus firmas domésticas.