Este artículo se publicó hace 13 años.
Una alternativa a la dación
La UE prepara una ley que da más valor a las viviendas embargadas
Miles de hogares en España han visto en esta crisis cómo después de que les embargaran su vivienda por no pagar la hipoteca siguen debiendo una cuantía millonaria al banco, en algunos casos igual o superior a la que habían pedido prestada. La culpa la tienen los elevados intereses de demora y el escaso valor que el banco da a la vivienda cuando se la queda. La culpable es una legislación que permite a la entidad financiera quedarse el inmueble por sólo el 60% del valor de tasación actualizado (como mínimo un 30% inferior al que pagaron en 2007 o 2008 cuando compraron la casa).
En la práctica, eso supone que a alguien que pagó 100.000 euros por su vivienda en 2008, ahora le reconozcan apenas 42.000 euros, con lo que puede perfectamente deber al banco otros 100.000 euros (añadidos los gastos del proceso y los intereses de demora) después de quedarse sin su vivienda.
Los bancos deberán reconocer a las casas el valor que le dan en sus cuentas
El Parlamento Europeo está intentando cambiar esta realidad. Está estudiando una fórmula que dé muchos más derechos al usuario en caso de que no pueda pagar su hipoteca, aunque no llega al derecho a la dación en pago obligatoria, que es la que están demandando los usuarios. En todo caso, es una opción mucho más beneficiosa que la actual. Está incluida en la propuesta de reforma de la ley Hipotecaria que ha presentado la Comisión Europea y que ahora analiza la comisión de Economía del Parlamento Europeo.
El ponente de la nueva norma, el socialista español Antolín Sánchez Presedo, explicó recientemente en un seminario celebrado en Vigo que con la nueva regulación "muchos de los problemas del sistema financiero no se hubieran producido". La solución que se propone, y que previsiblemente se aprobará en primavera, es que los bancos reconozcan al cliente el mismo valor de la vivienda que ellos tienen apuntado en sus cuentas. En la práctica, eso supone reconocer al menos un 70% del valor al que se concedió el crédito, frente al poco más del 40% que están apuntando actualmente. De esa forma, la mayor parte de los hipotecados podrían cancelar la totalidad del crédito cuando les embargan la vivienda. Eso sí, seguirán quedándose en la calle, pero al menos no seguirán debiendo al banco una cuantía similar a la que debían cuando tenían una casa en la que vivir.
Sánchez Presedo rechazó imponer obligatoriamente la dación en pago (para no ser excesivamente estrictos y caer en la sobrerregulación) y explicó que la norma lo dejará como una opción que se llevará a cabo si las dos partes están de acuerdo. Aunque reconocen el avance de la nueva normativa, los usuarios siguen sin estar conformes con esta legislación. Lo que ellos piden es la dación en pago y que se ejecute con efecto retroactivo. Rafael Mayoral, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, aseguró en el seminario, organizado por la Oficina del Parlamento Europeo en España: "Me ha dejado perplejo oír hablar de dación en pago solo si hay acuerdo entre las partes, cuando hay más de 3 millones de viviendas vacías y se está produciendo una violación sistemática de los derechos de los deudores en las ejecuciones hipotecarias".
Los usuarios exigen que se imponga la dación en pago para todas las hipotecas
Por el contrario, desde la patronal de banca (AEB), Alfonso Caro, aseguró que "la dación en pago no es la solución a la situación de la vivienda, ya que, entre otras cosas, causaría un encarecimiento de los préstamos y menor acceso a la vivienda".
Una de las cuestiones más importantes para implantar con seguridad la nueva normativa es que la tasación de la vivienda se haga por empresas realmente independientes, a diferencia de la mayoría que operan actualmente en España, que son propiedad de las entidades financieras. De eso también pretende encargarse la UE.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.