El Calderón vibró cuando Agüero dejó de calentar. Quique buscaba una chispa para quebrar el partido. Un gesto que cambiara el discurso opaco en el que se había mecido el Atlético durante tanto tiempo. Y para la búsqueda del positivismo, qué mejor que Agüero.

El Kun fue suplente. Una lesión de pubis le empieza a perseguir malévolamente. Pero Agüero, como siempre, no defraudó. 13 minutos después de entrar al campo, encontró un balón imposible de rematar, que el argentino domó con una volea imposible.

El pequeño delantero impresionó a Carlo Ancelotti. 'Sólo puedo decir que ojalá Aguero juegue algún día con Drogba', deseó el técnico del Chelsea. 'El Atlético no ha pesto en más aprietos de los que pensábamos reconoció el entrenador italiano. Creo que han pagado en demasía el mal inicio de la liguilla'.

Quique Flores no podía mostrarse tan satisfecho como su homólogo: 'No estoy nada contento, porque hasta el minuto 82 me vi ganador. El equipo ha mejorado a pesar de no tener tiempo y creo que defensivamente hay un mundo de cuando yo lo cogí hasta ahora. Se van cogiendo automatismos, pero ante delanteros como Drogba hay veces que no vale nada de lo que prepares'.

En la misma línea, moderadamente optimista, se mostró Cléber Santana: 'Hay un cambio anímico, pero no para echar las campanas al vuelo porque una derrota ante el Madrid el sábado nos dejaría muy hundidos'. Su compañero Asenjo sí que fue categórico: 'Las dudas se han acabado'.

Uno de los protagonistas de la noche fue Reyes, despedido con aplausos: 'La ovación ha sido bonita, creo que soy de los que más felices me voy a casa a pesar del empate. Cuando la afición está contigo te hace estar más tranquilo'

'El equipo ha estado bien en todos los aspectos, pero el Chelsea te podía hacer gol en cualquier momento y así ha sido', añadió el andaluz en Radio Marca. 'El equipo tiene ganas de salir el sábado, jugar bien y ganar [al Real Madrid] delante de nuestra afición'.

El centrocampista apuntó la razón de su mejoría: 'Estoy bien con Quique, y cuando un entrenador te da cariño hay que responderle en el campo'.

Por otra parte, la Policía Nacional tuvo que realizar diversas cargas contra un grupo reducido de aficionados del Chelsea que, en las inmediaciones del estadio Vicente Calderón, cerca de la estación del metro de Pirámides, se enzarzaron con seguidores del Atlético.

Los aficionados de ambos equipos se lanzaron mutuamente botes de cerveza, por lo que la Policía cargó para disolver las peleas y despejar la zona. Una vez conseguido, los hinchas del Chelsea continuaron su camino hacia el estadio escoltados por la Policía. Unos 2.000 seguidores del Chelsea presenciaron el partido desde una de las esquinas del fondo norte del Vicente Calderón.