El Atlético de Madrid recurrirá ante el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS) para impugnar la decisión de la UEFA de sancionar al club con un partido a puerta cerrada.

En respuesta a una apelación anterior del Atlético, los responsables del fútbol europeo redujeron el viernes a un partido a puerta cerrada la sanción previa, que castigaba al club madrileño a jugar dos partidos de Liga de Campeones fuera del Vicente Calderón.

Sin embargo, el AAtléticolético sigue sin estar de acuerdo con la nueva resolución y el proceso.

"El Atlético de Madrid va a luchar por su inocencia hasta el final. Ha existido una rebaja con respecto a la sanción inicial, pero no estamos de acuerdo en la manera en que se ha llevado el procedimiento", afirmó el gerente de la entidad, Clemente Villaverde, en la página del club (www.clubatleticodemadrid.com).

"Lucharemos hasta la siguiente instancia, el TAS. No nos han dado los fundamentos jurídicos de esta resolución todavía. Parece ser que ha existido un cambio de valoración del Comité y le han dado más importancia a los gritos racistas"

El Atlético había sido sancionado originalmente con dos partidos a jugarse a 300 kilómetros de Madrid, en una decisión que podía extenderse a un tercer encuentro en caso de más actos de violencia.

La sanción fue impuesta por la UEFA tras los actos de violencia protagonizados por algunos hinchas en el partido de Liga de Campeones disputado el 1 de octubre en el Vicente Calderón ante el Olympique de Marsella.

Los españoles ganaron 2-1 al equipo francés en un encuentro en el que se dijo que hubo cánticos racistas por parte de algunos aficionados rojiblancos, algo negado por el club.

El Comité de Apelación de la UEFA decidió reducir la sanción a un encuentro a puerta cerrada, que será el del 26 de noviembre contra el PSV Eindhoven. Además habrá un periodo de prueba de dos años, en el que en caso de incidentes se podría imponer otro partido de sanción.

Sin embargo, mantuvo el castigo de dos partidos para Javier Aguirre por insultar a un jugador del equipo griego, así como la multa de 150.000 euros para el club. Así, el mexicano no podrá estar en el banquillo el 4 de noviembre contra el Liverpool ni el 26 contra el PSV.

El comité dijo que adoptó su decisión "tras un cuidadoso estudio de todas las pruebas presentadas, y tras escuchar a las partes y a varios testigos".