Un balón en el juzgado

Tres años después y tras fracasar por la vía penal, una espectadora de Riazor reclama justicia por la vía civil y una jugosa indemnización por un balonazo que recibió durante la disputa de un Depor-Celta. La mujer, P. I. G. (no quiere ser reconocida), acusa del lanzamiento "a propósito" a Núñez, hoy futbolista del Murcia y entonces del Celta, que se encontraba calentando en el césped durante el descanso. El ex jugador del Madrid y del Liverpool se proclama inocente: "Yo no fui y tengo testigos".

"Era un derbi", sostiene la demandante, "y ya se sabe lo que sucede... Había insultos a los contrarios, pero no me explico su reacción. Tiró a dar a la grada y me tocó a mí. Me dio en el mentón y me sacudió la cabeza hacia atrás. El balón iba muy fuerte y me caí". El traumatismo y esguince cervical que consta en el informe fue la primera consecuencia del golpe. Durante seis meses de baja laboral, continuó con el tratamiento.

Nadie se preocupó por ella: "Tuve que costearme yo todo; desde los médicos, al fisioterapeuta, todo". Por eso denuncia al jugador, "por la voluntariedad", y al Deportivo, por la responsabilidad subsidiaria. La demanda se basa "en la negligencia como imprudencia".

"No es un delito", admite Ramón Senín, el abogado, "pero estimamos que debe de haber una indemnización por lo sucedido. Es como en los accidentes de coche". Desglosados por los días de baja que tuvo y las secuelas por los puntos de sutura recibidos, solicita 10.000 euros.

Al club le acusa de "no garantizar la seguridad como debe". "El Depor se interesó por mí unos días", reconoce la agredida. "Me ofrecieron su clínica, pero sólo les interesaba que no saliera el tema a los medios. Así me lo dijeron desde el departamento de prensa, los únicos que hablaron conmigo".

La versión de Núñez no concuerda. Sabe que aquel día pasó "algo", pero se desmarca: "Mi defensa es clara: yo no fui. Fue otro compañero [Aspas, hoy en el Piacenza de la Serie B italiana]. Jesús Perera o Esteban estaban allí y vieron lo que pasó. Ni estábamos dando balonazos a nadie, ni fui yo el que tiró".

"Cuando me dijeron que me habían denunciado", dice, "aluciné. Creo que esta señora intenta aprovecharse y sacar tajada. Yo estoy muy tranquilo, pero esto hace daño. He tenido que contratar abogados y tendré que desplazarme a Galicia al juicio por algo que no he hecho".