La "batalla" por Roma entre progresistas y conservadores acapara los comicios

Casi 6 millones de italianos están llamados hoy y mañana a las urnas para elegir en segunda vuelta 43 ayuntamientos, y cinco Diputaciones provinciales, en unos comicios en el que todas las miradas están puestas en la batalla entre progresistas y conservadores por la Ciudad Eterna.

En Roma se enfrentan el ex alcalde y ex ministro de Cultura Francesco Rutelli, del progresista Partido Demócrata (PD) y el ex ministro de Agricultura Gianni Alemanno, por el conservador Pueblo de la Libertad (PDL), del futuro presidente del Gobierno Silvio Berlusconi.

Para el Partido Demócrata, perdedor de las elecciones generales del 13 y 14 de abril, ganar Roma supone la "revancha" sobre Berlusconi y mantener un feudo en el que gobierna ininterrumpidamente desde 1993 y que desde 1989 ha tenido alcalde de izquierdas.

Roma estaba gobernada hasta ahora por Walter Veltroni, líder del PD, que dimitió de alcalde para presentarse a las generales. Rutelli aspira a ser "síndaco" de la Ciudad Eterna por segunda vez.

Para los conservadores, hacerse con Roma es la culminación de sus sueños, ya que además del Gobierno de la nación y mayoría absoluta en la Cámara de Diputados y el Senado también controlan 12 de las 19 regiones y la otra gran capital italiana, Milán.

En la primera votación, celebrada los pasados 13 y 14, Rutelli logró el 45,7 por ciento de los votos, mientras que Alemanno se quedó en el 40,7 por ciento.

Aunque en las elecciones generales los partidos de izquierdas se presentaron por separado, Rutelli cuenta ahora con el apoyo del PD y su aliado Italia de los Valores (del ex juez anticorrupción Antonio Di Pietro), así como de Izquierda Arco Iris, el cartel electoral de los dos partidos comunistas italianos y los verdes.

Alemanno acude apoyado por pequeños grupos y aunque rechazó el apoyo del derechista La Destra, todo da a entender que el 3,2 por ciento de votos que obtuvo este partido en la primera ronda del 13 y 14 de abril desemboque en su candidatura.

El partido democristiano centrista UDC ha dado libertad de voto.

Tanto el PD como el PDL se han volcado en Roma y los líderes de ambas formaciones, Veltroni y Berlusconi, han participado en numerosos mítines apoyando la campaña de Rutelli y Alemanno, en la que las propuestas sobre seguridad ciudadana, tras varios casos de violación protagonizados por inmigrantes irregulares, han sido la "estrella".

Además de Roma, de los 43 ayuntamientos, otros seis son también capitales de provincia: Sondrio, Vicenza, Massa, Pisa, Viterbo y Udine.

En estas ciudades, el PD fue el más votado en el primer turno en Sondrio, Massa, Pisa y Udine, mientras que el PDL lo fue en Vicenza y Viterbo.

Las Diputaciones Provinciales que se renuevan son las de Roma, Asti, Massa Carrara, Foggia y Catanzaro.

En el primer turno el PD logró el mayor porcentaje de votos en Massa Carrara, Roma y Foggia, mientras que los conservadores fueron los más votados en Asti y Catanzaro.

El 13 y 14 de abril los conservadores ganaron por mayoría absoluta las capitales de provincias de Brescia y Treviso, mientras que el progresista PD se adjudicó por mayoría absoluta Pescara.

En cuanto a Diputaciones, el PD ya logró en el primer turno por mayoría absoluta Vibo Valentia y Benevento, mientras que el PDL se hizo con Varese.

Los 6.566 colegios electorales abrieron a las 08.00 horas locales (06:00 GMT) de hoy y permanecerán abiertos hasta las 22:00 locales. Mañana se votará de 07.00 a 15.00 horas y después comenzará el escrutinio.

Según informó el Ministerio de Interior, a las siete de la tarde (15.00 GMT) había votado el 33,8 por ciento para los ayuntamientos y el 28,9 por ciento para las Diputaciones Provinciales, lo que supone un descenso, ya que a la misma hora del 13 de abril, votaron el 44,9 por ciento y el 42,7 por ciento, respectivamente.

En Roma a las siete de la tarde de hoy habían votado el 34,5 por ciento, frente a las 43,5 que lo hicieron a la misma hora el pasado día 13.

El buen tiempo y el hecho de que estamos en el puente del 25 de Abril (fiesta de la Liberación del nazi-fascismo) ha propiciado que muchos ciudadanos hayan aprovechado el día para ir a las playas o fuera de la ciudad.

Los políticos están convencido de que a últimas horas del día aumentarán las votaciones y, sobre todo, mañana.