Bautista confía en que impere el sentido común en la votación sobre el canon

El presidente del Consejo de Dirección de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), Eduardo Bautista, espera que el "sentido común" impere mañana en la votación en el Congreso sobre el canon digital y opina que esta polémica de dos años ha sido "una cortina de humo" para no hablar de otras cosas.

Bautista se pronunció en estos términos en una entrevista con EFE, justo después de que el Gobierno anunciara su propuesta de tarifas y soportes gravados por el canon digital -que se plasmará en una orden ministerial no antes de las primeras semanas de enero-, y mientras se prepara en el Congreso la votación de una enmienda que, de aprobarse, instaría al Ejecutivo a suprimir el canon en un año.

"No se entiende fácil que el Congreso de los Diputados tome ahora una posición con respecto a la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información distinta a la que tuvo en el primer momento. Creo que el sentido común tiene que imperar el jueves", pronostica el responsable de SGAE.

Respecto de la posición del líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, quien avanzó ayer que su grupo parlamentario votará el jueves a favor de eliminar el canon, al igual que hizo en el Senado, Eduardo Bautista reflexiona: "siempre he creído que Mariano Rajoy tenía bastante sentido común en asuntos de culturales, fue ministro de Cultura", recuerda.

"Su relación con los sectores culturales tiene que preservarse por encima de la lucha política; habiendo tantas cosas de las que debatir, ¿por qué esto tiene que ser terreno de batalla?", se pregunta Bautista, quien puntualiza: la recaudación por el canon en soportes analógicos y digitales representa poco más de cien millones de euros.

En este sentido, precisa que la propuesta del Gobierno -que gravaría con 1,5 euros los móviles y con 0,17 un CD- es "razonable, pero -advierte- menos de la mitad que en Francia y una tercera parte si la comparamos con Alemania. Pero, por algo hay que empezar", considera.

"Entiendo mal el empeño de algunos de que España sea una isla en Europa", insiste el presidente del Consejo de Dirección de SGAE, quien reconoce que desde que comenzó la negociación sobre la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual han pasado dos años "agotadores".

La Ley de Propiedad Intelectual estableció que las tarifas y soportes digitales sujetos al pago del canon deben regularse cada dos años en una orden ministerial conjunta de Cultura e Industria, aunque primero debe intentarse que las partes -sector industrial y entidades de gestión- lleguen a un acuerdo. En este primer caso, no hubo consenso y el Gobierno tuvo que intervenir.

"Viendo con frialdad el proceso, hubiera sido mejor haber tenido una única batalla y no distribuir la toma de decisiones en dos años, con oleadas de ataques y contraataques que nos han agotado a todos", prosigue Bautista, quien cree que el legislador debería haber dejado a las partes alcanzar acuerdos en "términos de mercado".

"Mi teoría -prosigue- puede resultar políticamente incorrecta: todo esto ha sido una cortina de humo perfectamente premeditada, porque mientras se ha discutido del canon y la copia privada no se ha hablado de las cosas realmente importantes, que son la carestía de los servicios de banda ancha en España -los más caros de Europa-; la escasa calidad de la red troncal; y, que hay productos imprescindibles -como los cartuchos de la impresora- que tienen un margen de beneficio astronómico".