Bélgica sigue sin Gobierno tras cuatro días de reuniones

El Rey de los belgas, Alberto II, no ha revelado aún cómo sacará al país de la crisis tras la dimisión del Gobierno, pero todo apunta a que la decisión no se hará esperar mucho más.

A última hora de anoche el monarca recibió en su residencia a la presidenta del Partido Democristiano de Flandes (CD&V), Marianne Thyssen, pero no han trascendido detalles del encuentro.

Sin embargo, sí se conocen pequeños detalles que depuran la opción final.

En primer lugar, queda descartado que el primer ministro, Yves Leterme, vaya a retomar el cargo por deseo expreso de él mismo de no desempeñar ningún papel en el próximo Ejecutivo, según confirmó su portavoz.

En la prensa belga se leen esta mañana todo tipo de hipótesis y análisis, pero el nombre que más suena como posible sustituto de Leterme es el del ex primer ministro Jean-Luc Dehaene.

Dehaene, al que en Bélgica conocen como el "bulldozer" por su capacidad para superar obstáculos, fue primer ministro en la década de los noventa y posteriormente alcalde del municipio bruselense de Vilvoorde.

Actualmente, es el nuevo presidente del consejo de administración del grupo bancario Dexia, uno de los grandes afectados por la crisis económica en Bélgica.

El diario francófono Le Soir asegura que de no ser el nuevo líder, lo que sí parece claro es que será algún miembro del CD&V, partido al que pertenece Leterme.

La Libre Belgique señala que la decisión está entre Dehaene y el actual presidente del Congreso, Herman Van Rompuy, y recuerda que aún sigue en el aire si el nuevo Gobierno tendrá carácter transitorio o agotará la legislatura, hasta 2011.

En cuanto a la composición de la nueva coalición, todas las fuentes coinciden en que se mantendrá el equilibrio político actual -liberales, socialistas y democristianos- en incluso los mismos ministros, a excepción de Leterme y del titular de Justicia, Jo Vandeurzen.