Bob Bell, director técnico de la escudería Renault F1, para la que compite Fernando Alonso, ha señalado que "todo el equipo está muy motivado y trabajando duro para mejorar el coche".

"Tenemos algunos proyectos interesantes en la fábrica que aportarán un mayor rendimiento al coche, tanto en el aspecto aerodinámico como en el mecánico. Todo el mundo (en el equipo) es muy positivo y está dispuesto a luchar", afirma en declaraciones difundidas por el equipo Renault.

Al recordar el Gran Premio de Malasia, Bell dice: "El rendimiento del equipo estuvo claramente por debajo de lo esperado. No contamos con ninguna novedad en el coche, así que básicamente era el mismo monoplaza con el que corrimos en Melbourne y vimos un nivel de competitividad muy similar".

"Sin embargo, durante las pruebas invernales comprobamos que el coche puede alcanzar un nivel de rendimiento bastante más alto, así que esperamos que el coche vaya a más", agrega.

"Así es que lo que sucede es que hasta ahora no estamos explotando al máximo el potencial del coche. Sospecho que hay algo que debemos solucionar, pero primero hay que encontrarlo y luego resolverlo. Para China haremos algunos cambios en el coche e intentaremos alcanzar el rendimiento al que queremos llegar, pero eso no nos permitirá estar todavía con los de delante", señala.

Sobre el Kers (sistema de recuperación de energía cinética), Bell señaló: "No hemos variado nuestra opinión sobre las ventajas que ofrece el Kers y seguiremos utilizándolo".

"Existen determinados circuitos en los que correr con el Kers ofrece una ventaja importante y Malasia sea probablemente uno de ellos, aunque a medida que transcurra la temporada nos encontraremos con circuitos en los que reaparecerá el debate de si correr con el sistema supone o no una ventaja", afirma.

"Así que hemos de analizar sus beneficios carrera a carrera, pero el circuito de Shanghái es uno de los trazados en los que debería ofrecer una clara ventaja. En general el sistema está funcionando bien y nos está ofreciendo las ventajas que esperábamos, tanto en cuanto a los adelantamientos como al hecho de defender posición, así como también en las salidas", comenta.

Al hablar del circuito de Shanghái, escenario este fin de semana del Gran Premio de China, Bell comenta: "Se trata un circuito moderno, con un asfalto bastante liso y que presenta una buena combinación de sectores de alta y baja velocidad: largas rectas, curvas lentas y virajes muy rápidos".

"Cualquier circuito con estas características ofrece todo un reto para los ingenieros a la hora de encontrar la correcta puesta a punto para el coche, que debe responder bien en los diferentes tipos de curvas", agrega.

"No es una pista especialmente exigente con los frenos, pero puede ser bastante dura con los neumáticos, especialmente en la primera curva, cuyo radio va cerrándose progresivamente. En cuanto a los niveles de aerodinámica, contaremos con un conjunto convencional, pero la prioridad será encontrar un buen equilibrio entre una configuración de baja y alta carga aerodinámica", explica.