La Comisión Europea (CE) envió ayer un pliego de cargos a Telefónica y Portugal Telecom (PT) por considerar que sellaron un acuerdo que vulnera la normativa europea de competencia. Dicho acuerdo consistió en un pacto de no agresión entre ambas en sus respectivos mercados, pero fue anulado en febrero del presente ejercicio, cuando se conoció la investigación de Bruselas. La CE considera que dicha anulación no invalida el hecho de que el acuerdo existió.

La acción por parte del Ejecutivo comunitario es una etapa previa a la investigación por violación de la normativa y no implica que las empresas sean culpables, según el comunicado difundido ayer. Según Bruselas, los límites a la competencia pactados entre empresas disminuyen la oferta para los consumidores y, como consecuencia, provocan que los precios sean más altos.

El acuerdo investigado se cerró en 2010, cuando Telefónica adquirió a Portugal Telecom la parte que aún no controlaba del operador brasileño de telefonía móvil Vivo por 7.500 millones de euros.

La intención de Telefónica, que está llevando ahora a término, era fusionar la operadora móvil con su negocio brasileño de telefonía fija Telesp.

Telefónica y PT disponen de dos meses para responder al pliego de cargos presentado por la Comisión. Fuentes del grupo español consultadas por este periódico no hicieron declaraciones al respecto y se limitaron a recordar que el pacto objeto de investigación no existe desde hace meses.

Multa histórica

Telefónica fue protagonista de una de las mayores multas impuestas a una firma de telecomunicaciones del Viejo Continente por parte de la Comisión Europea, que la sancionó con 152 millones de euros en julio de 2007.

Dicha multa fue recurrida por Telefónica, que contó con el apoyo del Estado español así como de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT). El recurso está pendiente de resolución.