Este artículo se publicó hace 14 años.
Cancelan el rascacielos de Jean Nouvel en "La Défense" por falta de inversión
El arquitecto y premio Pritzker Jean Nouvel renunció a erigir la Tour Signal, el que iba a ser el rascacielos estrella del distrito de negocios de París, debido a la falta de inversores para sufragar el proyecto, anunció hoy el organismo que gestiona "La Défense".
El arquitecto precisó en un comunicado que la Torre Signal "se realizará cuando la crisis se disipe".
La crisis inmobiliaria hace que "todos los proyectos actuales de edificios de gran altura se retrasen", agrega la nota de Nouvel, que explica que "los inversores que se encargan de financiarlos no se plantean construirlos de inmediato".
El arquitecto, que calificó el proyecto de "estratégico", aseguró que "conviene esperar un poco" pues "las crisis inmobiliarias son sinuosas" y que "en dos o tres años", los inversores buscarán proyectos como el de la Torre Signal.
La presidenta del organismo que gestiona "La Défense" (EPAD), Joëlle Ceccaldi-Raynaud, se dijo sorprendida al haber recibido una carta del despacho de arquitectos de Nouvel pues pensaba que conseguirían encontrar inversores para la torre, que debía medir 301 metros de altura.
El que debía ser el inversor inicial, el grupo español Meda, se había retirado del proyecto debido a la crisis inmobiliaria y los arquitectos no han conseguido encontrar a nadie que corra con los gastos del rascacielos, que se estiman en unos 600 millones de euros.
En mayo de 2008, un jurado del EPAD seleccionó la candidatura de Ateliers Jean Nouvel, Meda y Laetana Desarrollos Inmobiliarios, entre las 30 iniciales, para levantar una torre en el que se conoce como el barrio de negocios más grande de Europa.
Es la segunda vez que el reconocido arquitecto tiene que cancelar un proyecto de ese estilo en "La Défense", al noreste de París, después de que a principios de los años '90 una crisis inmobiliaria diera al traste con "La Torre sin Fin".
De haberse realizado, los 71 pisos de la Torre Signal la habrían convertido a finales de 2013 en uno de los rascacielos más altos de "La Défense", junto con las torres Hermitage Plaza, Generali y Phare.
El diseño, que proyectaba 140.000 metros cuadrados de superficie habilitados para oficinas, viviendas, comercios e infraestructura hotelera, se trata de una torre de planta rectangular compuesta por cuatro cubos superpuestos que ofrecen espacios abiertos al interior del edificio.
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