Iker Casillas, capitán de la selección española, destacó su buen hacer en el camino hacia Sudáfrica y aseguró que "tres puntos en Turquía", en el encuentro de mañana en el Ali Sami Yen, "sería poner un pie en el Mundial".

"El partido en Turquía es el más importante de la fase de clasificación. Sacar tres puntos es poner un pie en el Mundial de Sudáfrica. Hicimos bien los deberes ganando en el Bernabéu a una selección difícil. Contábamos con ganar en casa y ahora no perder fuera. Queremos dejar el pase más encarrilado", aseguró.

Casillas compareció en rueda de prensa acompañado de Dani Güiza. Los dos saben que les espera un ambiente duro en el partido ante Turquía. El capitán destacó la "pasión" con la que se vive el fútbol en Estambul.

"Un campo como el del Galatasaray donde hay más ambiente, donde se vive más el fútbol, aumenta la presión que si jugásemos en uno mucho más grande. Sabemos que en Turquía se vive el fútbol de forma muy apasionada, por los clubes a los que me he enfrentado en Champions, y con la selección mucho más. Un estadio lleno a rebosar va a crear una presión mucho más grande", analizó.

España tiene la posibilidad de seguir superando récords en caso de vencer a Turquía, pero Casillas transmitió como capitán el sentir del vestuario. A los jugadores, lo único que les importa es certificar cuanto antes el pase al Mundial.

"Al tema de los récords no le damos tanta importancia como la gente de fuera. Son marcas bonitas que quedan para la historia y te gustan, pero aquí se lleva la practica. Venimos con la idea de por lo menos puntuar, sería un paso muy importante, y si podemos ganar sería lo mejor. Por encima de cualquier récord está el bien colectivo", manifestó.

Y hasta justificó el bajón que pegó en el juego la selección española en el triunfo por la mínima del pasado sábado en el estadio Santiago Bernabéu.

"La gente tiene que entender que a estas alturas de campeonato la gente se juega mucho en Champions o Liga, que son muchos partidos los que llevamos y que, salvo el amistoso de Sevilla, hacía cuatro meses que no jugábamos juntos", explicó

"Habrá partidos que jugaremos mejor y en otros peor. El otro día la primera parte no fue buena pero en la segunda se vio nuestro nivel. No hay que dramatizar. Lo importante fue ganar con la mirada puesta en la clasificación para el Mundial", añadió.

Por eso, recordó que España ya está a un paso de Sudáfrica. "Llevo cinco fases previas y sólo recuerdo tan liviana la del Mundial de Japón y Corea con Camacho de seleccionador. Desde allí, ésta es la que mejor llevamos. A ver si la dejamos encarrilada antes del parón hasta septiembre".

Pese a los éxitos de la 'roja', para el portero madridista pasadas generaciones de futbolistas no tienen nada que envidiar a la actual.

"No creo que seamos mejores que otras generaciones. Por suerte estaba hace ocho años con gente muy buena como Guardiola, Hierro, Luis Enrique o Alfonso. A veces juntar buenos futbolistas no te llevan a un título. Ahora es diferente. Hay un grupo muy fuerte, unido, que juega muy bien", opinó.

Por último, destacó la fuerza defensiva que está demostrando la selección española en la fase de clasificación. Un gol en cinco partidos la hace ser la menos goleada junto a otras selecciones.

"Es el reflejo del buen hacer de la selección. Es una línea continuada de la etapa de Luis Aragonés, en la que el equipo no encajaba goles. Son cosas buenas que se están prologando. Apenas nos hacen ocasiones y nosotros hacemos muchos goles. Nos hace más fuertes", dijo.