Central Park, Crimen Park

Pasear por Central Park ya no es tan seguro como antes. Uno de los destinos favoritos de Nueva York, y de los propios habitantes de Manhattan, atraviesa su peor época en cuanto a violencia y robos. Según los últimos datos, el crimen en la zona ha aumentado un 45% respecto al año pasado. Cifras mayores teniendo en cuenta que el parque es visitado todos los años por unas 20 millones de personas.

En lo que se lleva de año se han producido siete violaciones, lo que supone un salto cuantitativo en comparación con 2009, cuando el casillero se dejó en cero.

Los robos hasta noviembre ya alcanzan los 22, cuatro más que en todo el año pasado y los incidentes han aumentado un 60% de los 35 de 2009 a los 56 actuales.

Ante la situación creada, las autoridades responsables de Central Park han recomendado, sobre todo a las mujeres, que no cojan atajos y caminen por zonas donde haya más visitantes. 

No es el único consejo. Además, se insta a que si se va a hacer ejercicio no se haga solo (especialmente en horas de poca visibilidad, como el amanecer o el anochecer), a que se varíe de ruta y a no llevar gadget suculentos para los ladrones, como teléfonos móviles e reproductores de música digital.

Geoffrey Croft, autoridad del parque, atribuye el incremento de la inseguridad a la crisis económica: no sólo porque aumenta el número de personas que roban para sobrevivir, sino porque también aumenta la cifra de parados que acuden a Central Park a pasar las horas muertas.