La situación de los siete españoles detenidos en Chad, por su supuesta colaboración en el secuestro de 103 niños para ser adoptados en Francia, sigue complicada. El ministro de Justicia chadiano, Albert Pahimi, aclaró ayer que los prisioneros permanecen en Abéché en 'prisión preventiva' a la espera de ser trasladados a la capital del país en dos o tres días para el juicio definitivo en Yamena. El juez local confirmó ayer la acusación de 'rapto de menores' y 'estafa' para los cooperantes franceses y 'complicidad' en los anteriores delitos para los españoles.

Todos los inculpados: seis miembros de la ONG Arca de Zoé, tres periodistas franceses, la tripulación española y dos funcionarios chadianos podrían enfrentarse a penas de 'entre cinco y 20 años de trabajos forzosos', según el fiscal de Abéché, Ahmar Daud. El piloto belga que trasladó a los niños desde la frontera chadiano-sudanesa hasta Abeché continúa detenido desde el domingo en Yamena, sin que aún haya presentado cargos contra él.

Decenas de personas se manifestaron ayer ante la sede del Palacio de Justicia de Abéché coreando lemas en contra de los detenidos para que sean juzgados en Chad.

Los niños no son de Darfur

Tanto ACNUR como UNICEF se han hecho cargo por el momento de los niños. Ambas organizaciones aseguraron que muchos de los niños, que siguen alojados en un orfanato de Abéché, lloran por las noches pidiendo ver a sus padres, quienes en realidad vivirían en poblados de Chad.

Esta afirmación confirmaría la estafa de la ONG que ayer mantenía en un su página oficial la versión de que la operación era de 'evacuación' para los niños de Darfur (región en guerra civil), tal y como habían anunciado en una campaña presentada el pasado abril.

El cónsul español en Camerún, Vicente Más, visitó ayer a los españoles y confirmó que 'no han recibido malos tratos'. Al Ministerio de Exteriores no le consta que haya alguna relación entre las intenciones de la ONG francesa y la tripulación de españoles, según afirmó el secretario de Estado, Bernardino León. 'Mientras no haya pruebas, nos ceñiremos a lo que afirman, que no tienen nada que ver: se les encargó tripular el avión y nada más', afirmó el cónsul.