Los enclaves húmedos de Castilla-La Mancha, que cuenta con el mayor número de los que pueden verse en nuestra península, son uno de los ecosistemas más concurridos de la fauna ibérica. Sobre todo en invierno, cuando decenas de miles de aves los usan como refugio y sustento.

La Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiente, presenta en el Antiguo Convento de La Merced de Ciudad Real, la exposición fotográfica Aguazales de Castilla-La Mancha con fotografías de Ángel Araújo y textos de Joaquín Araújo. Hasta el 6 de Marzo se podrá visitar esta muestra elaborada a partir del libro del mismo título, editado y producido por Lunwerg y patrocinado por el Gobierno regional.

El objetivo es el de difundir los valores naturales y culturales de nuestros humedales, conscientes de la necesidad de proteger el agua para conservar nuestro patrimonio.

A través de las cuarenta fotografías y los dos mosaicos que componen la muestra se ofrece una visión de los aguazales manchegos, en su mayoría de la llamada Mancha Húmeda, junto a las lagunas de la Serranía Conquense o del Alto Tajo.

Se pretende también con esta exposición que el público vuelva su mirada a esta Castilla-La Mancha desconocida para muchos y tome así conciencia acerca de la importancia que estos reductos de agua como eje fundamental de ciclos y procesos ecológicos esenciales.

La intensificación de los cultivos, la desecación o la sobreexplotación de los recursos hídricos, son algunas de las amenazas que han ido alterando el equilibrio de estos ecosistemas tan sensibles hasta provocar, en muchos casos, su desaparición.