China asegura que ya se han entregado 280 causantes de los disturbios en Lhasa

Las autoridades de Lhasa, la capital tibetana, aseguran que ya se han entregado a la policía 280 causantes de los disturbios del pasado 14 de marzo, en los que murieron, según fuentes oficiales, 19 personas.

De acuerdo con la agencia estatal Xinhua, se han emitido órdenes de búsqueda de otros 29 participantes en los actos de vandalismo, y se ha hecho pública una lista de otras 53 personas implicadas en los hechos.

Según Pekín, el 14 de marzo un numeroso grupo de personas atacaron escuelas, bancos, hospitales, tiendas, oficinas gubernamentales y redacciones de medios de comunicación, entre otros lugares.

Las violentas protestas se produjeron cuatro días después de que monjes tibetanos se manifestaran también en Lhasa para conmemorar el 49 aniversario de la rebelión contra el régimen comunista chino, unas protestas que fueron reducidas por las autoridades con gases lacrimógenos y el uso de la fuerza.

Los tibetanos en el exilio aseguran que las manifestaciones de esa semana fueron pacíficas, y que la represión policial causó 140 muertos, extremo que Pekín niega.

China ha acusado repetidamente al Dalai Lama de dirigir los actos violentos, mientras que el líder religioso, premio Nobel de la Paz 1989, ha pedido el cese de la violencia por parte de todos los bandos, aunque también aprovechó para acusar a Pekín de estar cometiendo un "genocidio cultural" en el Tíbet.