China desplazará a España del tercer puesto de destinos turísticos del mundo en 2020, según un estudio elaborado por Amadeus, proveedor mundial de soluciones tecnológicas y de distribución para la industria del viaje.

Los expertos consultados por Amadeus apuntan, asimismo, a que los Estados Unidos arrebatará ese año la primera posición a Francia, con una cuota del 76% del volumen total de turistas frente al 66% del país galo, por detrás del cual se situará China, con el 52%, y el cuarto lugar ocupará España, con el 28%.

España, que hasta hace un año, seguía siendo el segundo destino turístico del mundo ha sido relevada al tercer puesto por Estados Unidos (el mismo país al que adelantó después de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001) en 2008, cuando este último superó la cifra de 58 millones de turistas extranjeros frente a los 57,4 millones recibidos por nuestro país.

Las previsiones de los expertos consultados por Amadeus se basan en los grandes cambios de comportamiento de los viajeros impulsados por internet y que se extenderán aún más, gracias a la innovación tecnológica.

Fruto de esta evolución es un nuevo concepto de viajero "experto", más informado, exigente y aventurero a la hora de elegir nuevos destinos, lo que hará que los viajes al extranjero, especialmente a Asia y África, serán más demandados que nunca.

La procedencia del viajero moderno también será cada vez más variada, los norteamericanos y europeos, que tradicionalmente han dominado el sector de los viajes, dejarán paso a los países BRIC -Brasil, Rusia, India y China-, que se caracterizan por un rápido crecimiento de sus clases medias.

Según el informe de Amadeus, denominado precisamente "El viajero experto", este tipo de consumidor se inclinará bien por un servicio altamente personalizado, o bien por una experiencia cada vez más online en la búsqueda de información.

Del estudio se desprende que aún hay un gran margen para la innovación tecnológica en el sector, sobre todo, en la fase de búsqueda de información previa al viaje y su reserva.

La tecnología ha influido y mejorado enormemente el proceso de búsqueda, pero aún ofrece numerosas oportunidades para las empresas de viajes, y no sólo en la planificación de un desplazamiento, sino también durante el viaje en sí y en la fase posterior al mismo.

Para que el sector aproveche al máximo estas oportunidades, tendrá que implantar nuevas soluciones tecnológicas que ayuden a que la experiencia de viaje sea más cómoda, segura y personalizada, es decir, una tecnología "humanizada".

Las redes sociales y las tecnologías móviles seguirán siendo catalizadores del crecimiento, incluso en los mercados más maduros, y las mayores oportunidades de negocio para las empresas de viajes estarán en los nichos minoritarios de clientes, servicios y productos, cada vez más especializados.

En este sentido, los "viajes con estilo", los "de aventura", los "ecológicos", los "religiosos" y los "de novios" se configuran como áreas claves de crecimiento para los servicios especializados.