Cintra, filial concesionaria de Ferrovial, obtuvo en los nueve primeros meses del año unas pérdidas de 51,4 millones de euros, frente a las ganancias de 11,9 millones registradas en el mismo periodo del año anterior, debido al aumento de los gastos financieros.

Según comunicó hoy la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), las pérdidas del periodo se explican por la mala evolución del resultado financiero, que cayó un 38,4 por ciento por la incorporación de la deuda de nuevas concesiones (Toll Road, Bosque, Ocaña-La Roda).

Asimismo, la compañía achaca la evolución de su resultado neto al incremento de los gastos financieros por el mayor volumen de deuda o por la refinanciación de algunas de las autopistas que gestiona.

El importe neto de la cifra de negocio creció un 20,3 por ciento, hasta alcanzar los 766,5 millones de euros, y el beneficio bruto de explotación o EBITDA se situó en 520,5 millones, lo que supone un 20,8 por ciento más.

El área de autopistas de peaje, que supone el 85,7 por ciento de la cifra de negocio de Cintra, se incrementó el 24,3 por ciento hasta 657,5 millones de euros.

Estos datos responden al aumento del tráfico en las principales carreteras que gestiona, al incremento de las tarifas, a la incorporación de nuevas concesiones, a la integración de la chilena Talca-Chillán, a la adquisición de el Bosque y a la apertura de Ocaña-La Roda.

Dentro de las concesiones de autopistas, la principal fuente de negocio de la compañía es la canadiense 407 ETR, que alcanzó los 259 millones de euros, el 8 por ciento más, así como las autopistas chilenas registraron un incremento del 37,4 por ciento hasta los 126,4 millones de euros.

Los ingresos de la autopista Chicago Skyway cayeron el 10,7 por ciento hasta los 30,3 millones de euros, porque se vio afectada tanto por obras de construcción en otras vías como por las condiciones meteorológicas.

Asimismo cabe destacar el impacto en la facturación del aumento de las tarifas de la 407 ETR (8,3 por ciento), de la Indiana Toll Road (25 por ciento) y de la R-4 (5 por ciento).

Por otro lado, influyó también la incorporación de las carreteras Indiana Toll Road, las chilenas Talca-Chillán y el Bosque, la apertura de Ocaña-La Roda, el inicio de la facturación por tráfico en Norte-Litoral y la buena evolución de la N4-N6, factores que compensaron la variación del tipo de cambio.