Los colegios electorales abrieron hoy sus puertas a las 07.00 hora local (04.00 GMT) para los comicios legislativos del Líbano, que se plantean como una dura batalla entre prosirios y los antisirios.

Un total de 3.257.230 electores están llamados a elegir a 128 diputados, 64 cristianos y 64 musulmanes, entre unos 580 candidatos que se han presentado en todo el país.

La batalla principal enfrenta a dos coaliciones, las Fuerzas del 14 de Marzo, grupo mayoritario en el Parlamento y apoyado por Occidente y los países árabes moderados, y las Fuerzas del 8 de Marzo, encabezadas por Hizbulá y sostenidas por Siria e Irán, entre otros.

Estas elecciones, que se celebran por primera vez en un solo día y no escalonadas en cuatro domingos, como las veces precedentes, son supervisadas por mas de 200 observadores internacionales, entre ellos casi la mitad de la Unión Europea.

Unos 50.000 soldados y policías se han desplegado por el país para impedir cualquier altercado, que podría degenerar en una confrontación entre las distintas facciones ya que los ánimos están candentes.

Ayer, dos personas resultaron heridas en incidentes separados, uno en el norte y el otro este del país, en peleas entre grupos rivales.

Los cálculos iniciales indican que la batalla en el Legislativo está decidida ya en la mayoría de las circunscripciones, por el peso indiscutible que tienen las fuerzas políticas en cada área.

A pesar de ello, la batalla se anuncia encarnizada sobre todo en las áreas de mayoría cristiana y se calcula que el ganador lo será por pocos escaños.

Los colegios electorales cerrarán sus puertas a las 19.00 hora local (16.00 GMT) y se espera que los resultados se conozcan mañana.