Este artículo se publicó hace 16 años.
Comprando como hace un siglo
Abrieron sus puertas hace más de cien años, pero las tiendas centenarias de Barcelona siguen gozando de muy buena salud. Una ruta permite recorrerlas y descubrir sus secretos.
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Si las paredes hablasen, las de las tiendas centenarias de Barcelona nos contarían la vida de toda una sociedad, aquella que ha ido evolucionando a golpe del paso del tiempo entre sus mostradores, estanterías y escaparates. Desde la época modernista y el esplendor de la burguesía catalana hasta estos tiempos actuales en los que las compras se hacen cada vez más rápido, más a la ligera, menos conscientes del valor de lo que adquirimos. Por el contrario, la experiencia de entrar en uno de estos locales nos retrotrae al pasado y obliga, necesariamente, a la pausa y al sosiego, a la contemplación, como en un cuento mágico, de los productos que en ellos se exponen.
Recuperar la historia de tan singulares comercios es lo que se propuso la empresa ConèixerBcn con su ruta de tiendas centenarias. El 19 de septiembre, el 17 de octubre y el 20 noviembre son las tres próximas citas de un recorrido que puede concebirse, desde un punto de vista turístico, como un auténtico viaje a la Barcelona de hace un siglo. Os damos pistas de algunos de los locales emblemáticos por los que discurre:
Recorrido comercial y sociológico, por lo que tiene de descubrimiento de modos de vida pasados, la visita es delicia gastronómica, gusto en el vestir o muestra de la Barcelona más ingeniosa. Difícil resistirse, por ejemplo, a los sabores de Xocolates Amatller, la marca de cacao más antigua de España. Nada más y nada menos que en 1797 empezó la familia que les da nombre a fabricarlo, y ahí siguen. Igual que el comercio Qeviures J. Murrià, un auténtico museo de productos delicatessen. Quesos, licores y los mejores champagnes franceses siguen adornando sus interiores. La tienda es una joya por lo que vende y por lo que muestra: un edificio del modernismo catalán que brilla con luz propia desde 1898 en l´Eixample. Sus escaparates de madera y sus letreros, que todavía anuncian Licor Chartreuse, Malvasía Moscatel Robert, Manuel Raventós o Vinos de Alella, son auténticos atractivos para la vista y el paladar.
Como también lo es tomarse un café (60 por ciento natural, 40 por ciento torrefacto, en una combinación tradicional del local), en el Cafè del Centre. Se abrió cuando corría el año 1873 y por sus mesa pasó, entre otros, Salvador Puig Antich, el anarquista condenado a muerte por Franco después de ser detenido mientras se dirigía, precisamente, hacia el café. Historia directa que no cuesta demasiado intuir entre los detalles que se mantienen desde su apertura: el reloj, que todavía funciona; las gruesas cartulinas del calendario... Para seguir buceando en las tiendas centenarias por el lado gastronómico, el restaurante Can Culleretes, el más antiguo de Barcelona y el segundo de España, es una parada obligada. Fue fundado en 1786 y sus platos típicos catalanes y su ubicación en pleno Barri Gòtic son otros de los dos grandes atractivos que atesora. La Farmacia Ferrer Argelaguet, de estilo modernista y con detalles interiores de principios del siglo XX, y la sombrerería Obach, mítica tienda inaugurada en 1924, son un par de paradas más que no deberíamos perdernos.
Pero si hay dos lugares que dejan volar la imaginación en el recorrido por las tiendas centenarias de Barcelona, esos locales son El Rey de la Magia y El Ingenio. Con sólo nombrarlos intuimos que lo que aquí se va a encontrar es especial. Y, en efecto, lo es: El Rey de la magia es uno de los establecimientos más antiguos del mundo dedicado exclusivamente a la venta, enseñanza y fabricación de artículos para el ilusionismo. Por su parte, de El Ingenio han salido, entre otros productos relacionados con el espectáculo y el juego, las figuras de cartón piedra que alegran las fiestas de diversos lugares de Cataluña. 160 años de actividad ininterrumpida en lucha contra el aburrimiento.
Son más las tiendas, los rincones y, sobre todo, los secretos que estos comercios centenarios atesoran. Pero como todo secreto que se precie, una parte ha de ser guardada para seguir manteniendo la magia. Los curiosos que quieran saberlo todo tienen una cita de tres horas de duración en la que, por diez euros, podrán descubrir lo que encierran estos locales emblemáticos. Más información en la web de ConèxeirBcn y en los teléfonos 651579128 y 657436467.
La web de ConèxeirBcn, empresa organizadora de la ruta de las tiendas centenarias, es la manera más cómoda y rápida de conocer los detalles de este peculiar itinerario por la ciudad.
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