El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, ha asegurado hoy que la Fiscalía ha perseguido a los terroristas y a quienes les respaldan "hasta poner a todos ellos en la cárcel" y que seguirá haciéndolo, "estén donde estén, en España o refugiados en otra latitud".

Conde-Pumpido se ha pronunciado así en la Comisión de Justicia del Congreso al presentar la memoria de la Fiscalía General del Estado correspondiente a 2009, y sin aludir directamente al caso del etarra Arturo Cubillas, residente en Venezuela, cuya extradición ha solicitado el juez al Gobierno a instancias del fiscal de la Audiencia Nacional.

A este terrorista sí se ha referido el portavoz de justicia del PP, Federico Trillo, quien ha pedido a la Fiscalía garantías de que no está "jugando de farol" al solicitar su extradición sabiendo que Venezuela no va a acceder a la entrega a España.

Trillo ha recordado que en Venezuela existe el trámite de audiencia previa, al que ya ha recurrido el etarra que ha pedido la intervención del fiscal general de este país, en lo que, según el portavoz del PP, es un procedimiento de protección de nacionales que podría impedir la entrega y el juicio del terrorista.

Además, ha instado a Conde-Pumpido a que se dirija a su colega venezolano para que "no abuse de esa cláusula y, por tanto, entregue o juzgue" a Cubillas.

En su comparecencia, el fiscal general ha mostrado su convencimiento de que ETA se encuentra cerca de su final y ha alabado el "esfuerzo y coraje de jueces y fiscales", que hoy permite aventurar "con más esperanza, pero con toda cautela, la precipitación hacia el final del absurdo y sanguinario empecinamiento de quienes nunca debieron imaginar que su irracionalidad iba a quebrar una democracia tan largamente deseada".

En este contexto, ha asegurado que la Fiscalía seguirá persiguiendo con firmeza a los terroristas.

"Estén donde estén, en España o refugiados en otra latitud, y pretendan lo que pretendan, aunque lo que pretendan sea engañarnos para mantener una presencia en la vida institucional que consideran, seguramente con razón, su último y desesperado activo", ha dicho.

El fiscal general del Estado también se ha referido a la actuación de la Fiscalía Anticorrupción para luchar contra la corrupción económica y urbanística, "una de las mayores rémoras" del país, y ha puesto de manifiesto la "sensación de desconcierto" que produce que estas actuaciones sean "con frecuencia" motivo de confrontación entre las fuerzas políticas en vez de "exclusión" y "rechazo".

También ha defendido la independencia y profesionalidad del Tribunal Supremo y ha reprobado los ataques verbales que ha sufrido esta institución en relación a su actuación con los casos vinculados al juez Baltasar Garzón y que, ha recordado, siempre han sido rechazados por el Ministerio Público.

Por último, ha resaltado la necesidad de acometer en esta legislatura la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal que, entre otras cosas, otorgará la investigación en el proceso penal a los fiscales, y ha confiado en que las fuerzas políticas sean capaces de alcanzar un acuerdo.

Una modificación que Federico Trillo ha rechazado, al igual que la posibilidad planteada por el Ministerio de Justicia de limitar la actuación de la acusación popular.