El ex director de la Juventus Antonio Giraudo ha sido condenado a tres años en prisión por su participación en un escándalo de arreglo de partidos que estalló en 2006 en el fútbol italiano.

Giraudo, que ya había sido suspendido de las actividades futbolísticas por un tribunal deportivo en 2006, fue encontrado culpable de fraude deportivo y conspiración en un juicio penal vinculado al caso.

En 2006, la Juventus fue relegada a la segunda división italiana como consecuencia del escándalo, que implicaba a varios clubes que obtenían arbitrajes favorables para sus partidos.

Desde entonces, el club turinés ha regresado a la Serie A y vuelve a ser uno de los más potentes del país.

Por su parte, los árbitros Tiziano Pieri y Paolo Donarini han sido condenados a 28 meses y 2 años de prisión, respectivamente, mientras que Tullio Lanese, ex presidente de la federación de árbitros, recibió una sentencia de dos años de cárcel.

Siete árbitros y varios de sus asistentes, que al igual que los otros cuatro acusados del proceso solicitaron juicios rápidos, fueron absueltos.

Es probable que los cuatro hombres declarados culpables no cumplan sus penas de prisión, debido a los procesos de apelación y a un perdón por delitos no violentos anterior a 2006.

A su vez, el ex director general de la "Juve" Luciano Moggi pidió un juicio normal, que se está celebrando ahora.

Los fiscales de Nápoles que habían pedido una sentencia de cinco años de cárcel para Giraudo, solicitaron un juicio penal después de las penas aplicadas por el tribunal deportivo.