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Confianza en que las pruebas de estrés reaviven el crédito

Los expertos creen que ayudarán a abrir la financiación a empresas y familias. Algunas entidades españolas suspenderán el examen

D. BASTEIRO / V. ZAFRA

El mero anuncio de que se van a publicar las pruebas de estrés realizadas a una parte importante de las entidades financieras europeas (incluidos todos los bancos y cajas españoles) han servido ya para tranquilizar un poco a los mercados y para que aumenten su confianza en la deuda pública de países como España o Irlanda. Sin embargo, el gran reto a partir de mañana, cuando se darán a conocer las cifras, será recuperar en Europa, y sobre todo España, el crédito a familias y hogares, que hoy está paralizado debido a las dificultades que tiene la banca para acceder a liquidez.

El economista jefe de Intermoney, José Carlos Díez, aseguró a Público que el objetivo crucial de estas pruebas es conseguir abrir el crédito minorista. Se muestra optimista, ya que si vuelve la confianza la entidades financieras también volverán a prestarse dinero entre sí y podrán captar liquidez a más largo plazo y se animarán a dar crédito, pero recuerda que en Estados Unidos este último efecto sigue sin ocurrir un año después de publicarse sus pruebas. Allí, se recuperaron los mercados y la economía salió adelante, pero no así el crédito empresarial.

Si las entidades vuelven a confiar entre sí, tendrán más dinero para prestar

El catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Granada y asesor de la Reserva Federal de Chicago, Santiago Carbó, da por hecho que a partir de mañana 'se despejarán las dudas' y bancos y cajas podrán captar fondos para hacer frente sin problemas a sus grandes vencimientos de deuda, aunque no cree que a corto plazo vaya a provocar un crecimiento del crédito en España porque todavía es necesario profundizar en el desendeudamiento de empresas y hogares. Sin embargo, sí cree que beneficiará al crédito a medio plazo. 'Si lo hacemos bien y demostramos que el sistema financiero está bien capitalizado, se acortarán los plazos para que vuelva el crédito', aseguró. Donde sí podría notarse de forma inmediata el efecto positivo, es en la financiación de grandes empresas muy solventes.

Al margen de si serán tan eficientes como para mejorar el crédito, los expertos tienen claro que en poco tiempo estas pruebas servirán para reducir los precios que los estados pagan por emitir su deuda. El diferencial de España con Alemania (que llegó a 2,2 puntos porcentuales) ya ha caído y se seguirá reduciendo hasta situarse entre 1,2 y 1,4 puntos, según los expertos.

En todo caso, los resultados de las pruebas de estrés corren el riesgo de no convencer a todo el mundo y, por tanto, por no acabar con la desconfianza. Varios analistas, especialmente desde el otro lado del Atlántico, han empezado a sembrar dudas sobre su fiabilidad. El diario International Herald Tribune se hacía ayer eco de estas incertidumbres y citando a varios expertos aseguraba que la negativa de las autoridades europeas a explicar cuáles son los parámetros que han tenido en cuenta para hacer estas pruebas 'está generando confusión sobre si los bancos que superen el test estarán realmente lo suficientemente sanos como para afrontar otra crisis'. Jordi Fabregat, profesor de Finanzas de Esade, cree que si todas las entidades aprobaran 'resultaría sospechoso', aunque no cree que vaya a ser así. José Carlos Díez, por su parte, defiende que las pruebas europeas van a ser mucho más duras que las estadounidenses, van a implicar a más entidades y van a ser más transparentes porque se va a someter a estrés a más variables que en su caso. Santiago Carbó no cree tampoco, como se ha dicho en algunos foros, que estos análisis estén manipulados para que todas las entidades salgan bien paradas. 'Confío en que hayamos aprendido que demorar el diagnóstico y las respuestas es un error muy importante'.

Desde Estados Unidos se plantean dudas sobre la fiabilidad de los test

Los expertos consultados por Público creen que el sistema financiero español saldrá en conjunto muy bien parado de estos ejercicios porque sus tres mayores representantes (Santander, BBVA y La Caixa) están en muy buena situación, aunque todos prevén que algunas entidades, tanto cajas como bancos, necesitarán más capital. El presidente de la CECA, Isidro Fainé, se mostró ayer convencido de que los test saldrán bien. 'Todo lo que teníamos que hacer ya lo hemos hecho', dijo. Entre otras, la aprobación de una nueva Ley de Cajas, que ayer convalidó el Congreso. Fainé alabó la normativa porque les permite captar capital. 'Si las cajas no estuvieran en los mercados, desaparecerían', aseveró.

1 Lento Crecimiento

El primero de los tres escenarios en los que se ha basado esta prueba es que la economía se comporte como está previsto, es decir, que se vaya recuperando lentamente. En ese caso, las pruebas pretenden ver en qué situación estará cada entidad a final de 2011. Si para entonces tiene un nivel de Tier 1 (capital de la máxima calidad) del 6%, no necesitará captar más capital.

2 El PIB cae tres puntos sobre lo previsto

El segundo escenario, mucho más crítico que el anterior, consiste en calcular una caída de tres puntos sobre la evolución del PIB prevista por la Comisión Europea para los próximos dos años. Sobre ello, los supervisores han calculado hasta dónde llegaría la tasa de paro, cómo evolucionarían los precios y cuánto implicaría de crecimiento de la morosidad. Cualquier entidad que en ese caso tampoco alcance un capital del 6% también tendrá que recurrir al mercado, aunque en este caso tendrá más tiempo porque el escenario es poco probable.

3 Crisis de la deuda soberana

Las pruebas han tenido muy en cuenta las dificultades que ha atravesado la deuda pública en los últimos meses y ha incluido como una de las hipótesis una crisis de deuda soberana. El examen de resistencia se concentrará en el aumento del diferencial con Alemania, no en la quiebra de un país concreto, según Bloomberg. 

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