Continúa la huelga de transportes en Francia a la espera de los resultados de los contactos

El transporte ferroviario y urbano en la región de París continúa hoy alterado en el quinto día de huelga, a la espera de que la próxima semana los contactos informales que mantienen las partes puedan fructificar de alguna manera.

Para este domingo está previsto que funcionen 250 de los setecientos trenes de alta velocidad programados inicialmente, así como una cuarta parte del resto de líneas de largo recorrido y el cuarenta por ciento de los trenes regionales.

En la región de París en el metropolitano funciona de modo desigual, con un veinte por ciento de media, mientras que en los cercanías las líneas prestan un servicio de un convoy cada veinte minutos en el mejor de los casos o cada hora en el peor.

Varias federaciones de sindicatos de ferroviarios tienen previsto reunirse a lo largo de la jornada para analizar la situación y estudiar posibles pasos en los próximos días.

Ayer sábado el ministro de Trabajo, Xavier Bertrand, mantuvo conversaciones telefónicas con diferentes líderes sindicales para intentar acercar posiciones y permitir un final del paro y un comienzo de las negociaciones formales.

El miércoles pasado por la noche, horas después del comienzo del paro, el Gobierno ofreció una negociación tripartita con presencia de los directivos de las empresas públicas afectadas y de los sindicatos.

Lo que parecía una salida rápida del conflicto quedó sólo en apariencia, ya que ambas partes se han ofuscado.

El Gobierno condiciona la apertura del diálogo a una vuelta al trabajo, lo que los sindicatos no admiten para mantener la presión y, además, piden que no haya condiciones previas.

En concreto, las centrales reclaman que la base de partida no sea aceptar que el período de cotización para acceder a la pensión pase inevitablemente de 37,5 a cuarenta años, lo que para el Gobierno es innegociable.