Este artículo se publicó hace 16 años.
El contramaestre de "Playa de Bakio" dice que si no hacen algo, en un año no se podrá faenar en la zona
El contramaestre del "Playa de Bakio", Ánxel Fernández, considera que si las autoridades internacionales no hacen algo, en un año no se podrá faenar en la zona donde fue apresado y secuestrado el atunero.
"Si no ponen nada -dijo en declaraciones a la TVG recogidas por Efe- dentro de un año allí no puede trabajar nadie", porque "Al Qaeda quiere meter sus seguidores allí y, si se mete esa gente, nosotros no trabajamos y no puedes trabajar a 300 o 400 millas, porque el pescado está ahí".
El marinero valoró la presencia de la fragata "Méndez Núñez" en la zona, aunque tardaron varios días en conocer la noticia, y, preguntado si al marchar miraron mucho para atrás, contestó que no, "mirábamos para el frente, porque había otros piratas que nos querían coger y, si no está la "Méndez Núñez" allí, no estaríamos nosotros ahora aquí".
Sobre las comunicaciones con sus familias, Fernández explicó que sólo les dejaron hablar con ellas al llegar a tierra, aunque se negaron al principio y él le dijo al que consideraba el negociador: "Hombre, que yo soy un viejo, ¡joder!, tengo hijos, déjame llamar a casa, que quiero hablar con la mujer y los hijos", a lo que le contestó que "bueno, si es a la familia, un minuto".
En cuanto al "día a día" del período de secuestro, comentó que era "del comedor al camarote" y no les dejaban subir a cubierta, donde estaban apostados los piratas, y la comida, que hacía el cocinero ghanés del propio atunero, debían de probarla primero los tripulantes antes de que la comiesen los secuestradores.
Tras señalar que "en todo momento" temieron por sus vidas, que "estábamos convencidos que todos no volvíamos a casa", el contramaestre explicó que volverá a faenar en la zona "dentro de 40 días. Allí está nuestro trabajo -agregó- como el vuestro aquí (dijo a los periodistas), no tenemos otra alternativa".
Reconoció, no obstante, que irá con miedo, como los compañeros que están ahora allí, "yo estuve hablando con la mujer del que me hizo a mi el relevo y están en la casa oprimidos", apuntó.
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