Los contratos de adquisición de los derechos audiovisuales de los clubes de fútbol no podrán tener una duración superior a los cuatro años, según una enmienda que incluirá el Grupo Socialista en el articulado del proyecto de Ley General de la Comunicación Audiovisual tras dialogar con los propios clubes. Según informaron ayer a Público fuentes parlamentarias, este nuevo artículo 'da tranquilidad' a los clubes y permite superar el problema planteado por la Comisión Nacional de Competencia, que estudiaba reducir la duración de los contratos de cinco a tres años.

Asimismo, según indicaron las mismas fuentes, se trata de una modificación que 'no perjudica a nadie', ya que los contratos vigentes, suscritos en su mayoría a cinco años, 'seguirán siendo válidos hasta su finalización siempre y cuando esta finalización tenga lugar en el plazo de cuatro años desde la entrada en vigor de la ley', lo que ocurre en la mayoría de los casos, según consta en otra enmienda del PSOE que figurará como disposición transitoria.

Los clubes serán consultados para fijar el partido de los sábados

Con ambos cambios el Grupo Socialista marca un plazo 'razonable' tanto para los clubes, que necesitan contratos cuanto más largos mejor para que les sirvan de aval a la hora de recurrir a los bancos en busca de crédito, como para las autoridades de Competencia y las propias cadenas.

Por otro lado, los clubes tendrán una mayor participación a la hora de fijar los horarios de las retransmisiones y en cuál debe ser el partido del sábado, aunque esta medida no se circunscribe sólo al fútbol.

El PSOE se niega a acabar con el partido en abierto

Así, en virtud de otra enmienda, los organizadores de competiciones deportivas tendrán que ser consultados a la hora de aprobar el catálogo de acontecimientos de interés general, eventos entre los que seguirá figurando el partido en abierto de los sábados.

En este sentido, las fuentes consultadas señalaron que pese a las demandas del mundo del fútbol para acabar con esta emisión, el PSOE finalmente se ha negado a ello.

Otras enmiendas del Grupo Socialista van dirigidas a 'perfeccionar' el régimen sancionador para hacerlo 'más racional y progresivo'.

No obstante, el PSOE no descarta pactar con el resto de grupos ulteriores cambios en el proyecto de Ley, que sigue su tramitación en el Congreso tras haber superado en la mañana de ayer su primer escollo: las enmiendas de totalidad planteadas por el PP y ERC-IU-ICV, que criticaron duramente el texto.

Para ello, el PSOE consiguió el apoyo de CiU y CC, lo que permitió que las enmiendas fueran rechazadas con 149 votos a favor, 176 en contra y 10 abstenciones (PNV, NaBai, BNG, y UPN). En su defensa del proyecto, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, calificó la norma de 'moderna, necesaria, equilibrada y liberalizadora'.