El movimiento islamista Nahda ha obtenido una contundente victoria entre los votantes tunecinos en el exterior, al llevarse la mitad de los escaños en liza, mientras que se ignoran todavía los resultados, incluso parciales, de los votos dentro del país.

La única cifra oficial ofrecida hasta ahora por la Instancia Superior Independiente Electoral (ISIE), 24 horas después del cierre de los colegios, muestra que Nahda se ha hecho con 9 de los 18 escaños reservados a los tunecinos de la emigración (del total de 217 con que cuenta la Asamblea Constituyente).

Además, otros 4 escaños han ido al Congreso por la República (CPR), del opositor histórico Monsef Marzuki, que se considera un partido cercano a la línea de Nahda, mientras que dos partidos "laicos" solo obtienen 4 escaños.

En todo caso, las cifras globales con los resultados del interior del país no se ofrecerán como mínimo hasta mañana, martes, y no tendrán carácter oficial pues faltará por resolverse los recursos de los diferentes candidatos.

El movimiento Nahda, que maneja sus propios recuentos basados en sus interventores (pues los tenía en todo el territorio tunecino), afirma haber obtenido un 40 % de los votos, según dijo a Efe Sami Triki, líder de las Juventudes del movimiento.

Más tarde, el jefe de campaña de Nahda, Abdelhamid Eslassi, ofreció una rueda de prensa para matizar esta cifra, y dijo que su partido ha obtenido más del 30 % de votos y que se ha impuesto en la mayoría de las circunscripciones.

El Partido Demócrata Progresista (PDP), símbolo del frente laico, parece haber sufrido una derrota estrepitosa, y sus máximos dirigentes, el presidente Nayib Chebbi y la secretaria general Maya Zribi, convocaron a la prensa para reconocer su derrota, felicitar a los ganadores (a los que no citaron) y subrayar que hay que respetar "la opción del pueblo".

Zribi lanzó un llamamiento a "las fuerzas progresistas y demócratas, que deben sacar las enseñanzas necesarias de la campaña y sus resultados", en alusión a la desunión que ha caracterizado a las fuerzas laicas, que se presentaban en tres grandes bloques y no fueron capaces de formar una lista conjunta.

Un grupo de unos cincuenta jóvenes seguidores de estos partidos laicos y convocados a través de las redes sociales se reunieron hoy frente al Palacio de Congresos, aprovechando la presencia de cientos de periodistas, para protestar por los "abusos" de los militantes de Nahda, a los que acusaron de comprar votos y de hacer campaña hasta en los mismos colegios electorales.

Los jóvenes, que portaban carteles donde equiparaban a Nahda con el nazismo o con el poder del dólar, acusaron también al ISIE de permitir a Nahda todas estas prácticas.

Sin embargo, al menos dos instituciones internacionales de observación electoral, la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE) y el National Democratic Institute (de Estados Unidos) alabaron hoy el desarrollo de las elecciones tunecinas y calificaron de "mínimas" las irregularidades.

Roberto Migliori, jefe de la delegación de la APCE destacó que no pudieron constatar "ninguna irregularidad extendida ni sistemática", que "las reglas de juego fueron respetadas por todos", que hubo "igualdad de oportunidades" entre los candidatos y que, en suma, "estas elecciones pueden servir de ejemplo para los países de la región".

La Asamblea Cosntituyente elegida en los comicios de ayer tendrá un mandato de un año, y tendrá como tarea elegir un nuevo gobierno, un nuevo presidente de la República y poner en pie las instituciones del nuevo Túnez democrático.

Javier Otazu y Miguel Albarracín