Este artículo se publicó hace 14 años.
El coste estimado de las huelgas en Francia es de 200 a 400 millones de euros por día
El coste económico de las huelgas por la reforma del sistema de pensiones en Francia se sitúa entre 200 y 400 millones de euros por cada jornada de paro interprofesional, señaló hoy la ministra de Economía, Christine Lagarde.
En una entrevista a la emisora de radio 'Europe 1', Lagarde no quiso avanzar una factura global desde que empezó el movimiento contra el proyecto de ley de su Gobierno, por considerar que "es muy difícil de cifrar.
'Le Figaro', a partir de las cuantificaciones del Ministerio de Economía, había dado hoy una horquilla de 1.600 a 3.200 millones de euros por las ocho jornadas de paro interprofesional que ha habido hasta ahora, lo que incluiría "las horas de trabajo perdidas y las pérdidas sufridas en los diferentes sectores".
Lagarde puntualizó que además de eso hay un "perjuicio moral" por lo dañada que sale la imagen de Francia en el exterior.
Uno de los sectores más afectados es el petroquímico por el paro total de la actividad en las 12 refinerías del país, en algunas de ellas desde hace más de dos semanas, a lo que se suma el bloqueo de depósitos de carburante que ha provocado que un cuarto de las gasolineras del país estuvieran ayer desabastecidas, según reconoció el Gobierno.
Además, la Unión Francesa de Industrias Petroleras (UFIP) advirtió de que hoy la situación podría empeorar provisionalmente debido a que en la jornada de ayer muchos camiones cisterna que transportan el combustible hasta las estaciones de servicio no circularon por el descanso dominical.
Esta mañana, las fuerzas del orden desbloquearon sin incidentes el depósito petrolero de Saint Pierre des Corps, cerca de Poitiers (centro), donde varias decenas de manifestantes habían estado impidiendo el acceso a los camiones de abastecimiento.
Paralelamente, un grupo de varios cientos de huelguistas del puerto de Marsella (sureste) volvieron a bloquear esta madrugada los depósitos de la zona portuaria de Fos sur Mer.
Las instalaciones de almacenamiento de carburante de Fos sur Mer, las más importantes de la región con una capacidad de 860.000 metros cúbicos, habían quedado cerradas por la acción de manifestantes el pasado día 14, pero agentes antidisturbios lo desbloquearon un día más tarde.
Esta mañana la huelga se dejaba sentir en los ferrocarriles, aunque la situación era mejor que en los últimos días, ya que circulaban más de ocho trenes de alta velocidad (TGV) de cada diez de los programados habitualmente.
La compañía ferroviaria SNCF también indicó que iban a funcionar en torno a dos tercios de los regionales, un 70% de los cercanías y un 60% de los trenes de noche.
El ministro de Trabajo, Eric Woerth, afirmó anoche que continuar con las protestas no sirve "para nada" porque la ley que eleva en dos años la edad de jubilación va a ser adoptada por el Parlamento esta semana y "hay que respetarla".
Woerth, en una entrevista a la cadena de televisión 'France 3', advirtió de que "el Gobierno hará todo lo posible para restablecer el orden respetando el derecho de huelga", pero no quiso avanzar si como la semana pasada habrá nuevos decretos para obligar a trabajar a huelguistas de refinerías.
Los sindicatos han convocado una nueva jornada de paros interprofesionales el próximo jueves, y otra jornada de manifestaciones el sábado 6 de noviembre.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.