Un diario cercano al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, lanzó el domingo un ultimátum a sus aliados, diciendo que deben respaldar las leyes que lo protegen de procesos judiciales o arriesgarse a un derrumbe del Gobierno.

Il Giornale, un indicador de los ánimos y descontentos de Berlusconi, dijo que la próxima será una "semana de pasión" para la coalición y podría conducir a la renuncia del Gobierno y a elecciones generales anticipadas.

El titular de la primera plana de Il Giornale, propiedad del hermano de Berlusconi, Paolo, decía: "Ultimátum de Berlusconi: Los que no están de acuerdo están fuera del PDL", refiriéndose a su coalición El Pueblo de la Libertad.

La noticia también indicó que los aliados de Berlusconi deben comprometerse a "proteger al primer ministro de la ofensiva judicial en su contra" o de otro modo "El Gobierno renunciará y habrá nuevas elecciones".

Berlusconi, quien perdió su inmunidad el mes pasado, a menudo ha mostrado su furia contra el sistema judicial, diciendo que fue invadido por "comunistas" para destruirlo.

El primer ministro ha estado de ánimo combativo desde que el Tribunal Supremo de Italia determinó que su protección de procesos judiciales mientras está en el cargo viola la Constitución.

Desde el fallo, los abogados de Berlusconi han estado trabajando contrarreloj para reformar el lento sistema judicial de Italia, una iniciativa que según críticos lo protegería una vez más de procesos judiciales y bloquearía los juicios que lo vinculan.

Según la información de los grandes diarios, Berlusconi quiere presentar una legislación al Parlamento que pondría límites de tiempo en las tres etapas de los casos judiciales en Italia: juicio inicial, primera apelación y apelación final.

Según una propuesta, las tres etapas deben llevarse a cabo dentro de los seis años o entraría en juego la prescripciójn de los delitos y los casos se declararían nulos.

Aunque los italianos quieren una reforma del ineficiente sistema judicial, la oposición dice que el objetivo real de Berlusconi es recuperar su inmunidad.

"Berlusconi no quiere que los juicios se realicen rápido (...) quiere la certidumbre de la impunidad", dijo Antonio Di Pietro, un ex magistrado anti corrupción y líder de un pequeño partido de la oposición.